5 lecciones para activar la expresión glocal, por Vokaribe Radio

A Walter Hernández  le preocupa el miedo. Lo ha dicho en entrevistas y lo ha cantado desde su banda, el sabroso e insurrecto Systema Solar: el miedo alimenta las murallas, las construye. El miedo divide, como se dividen los barrios por fronteras invisibles, y como se divide Barranquilla entre múltiples ciudades, dependiendo del estigma.

Como le preocupa el miedo, Walter Hernández anda hace mucho tiempo buscando como hacerle frente. Esta lucha se hace visible en su música: Tumbamurallas, el primer track de su último álbum, es un himno contra el prejuicio, que pareciera hacer honor a lo que ha hecho en otro frente, mucho menos visible pero igual de poderoso: la radio comunitaria.

Este jueves 28 de septiembre, en el auditorio del Parque Explora, tras una antesala champetúa que puso a bailar a más de un asistente, Hernández resumió en 45 minutos los 25 años de resistencia barrial que ha liderado desde las ondas hertzianas de Vokaribe Radio.

Emitida desde la biblioteca comunitaria del barrio La Paz, en el suroccidente de Barranquilla, en un área de incidencia que alcanza las 500 mil personas, Vokaribe nos da algunas pistas para entender la relación entre la comunicación y el empoderamiento comunitario.

  1. Ser local y actuar global

Vokaribe se piensa y se explora desde su territorio, con su gente, hacia adentro. Y sin embargo, se sabe inscrita en un contexto más amplio. “Sentir local, actuar global”, dice Walter. Si bien la calle y las ondas radiales le permiten construir comunidad desde el territorio, el streaming abre un horizonte, una pregunta: ¿con qué otras comunidades puedo conectar y empatizar en la ciudad, el país, la región, el mundo? ¿Qué me une a otros barrios y otras comunidades de sentido?

  1. Abrir posibilidades de expresión

Las comunidades locales tienen todo en ellas para expresar lo que son y hacer visibles sus procesos y reivindicaciones. Cada habitante y cada cuadra son una historia y una “posibilidad de expresión”. En Vokaribe se habla desde el suroccidente de Barranquilla: “un espacio que no aprendimos a estigmatizar, sino que es estigmatizada desde otro espacios, desde el miedo”. Encontrar esas voces en el territorio es el primer paso para resistir y tumbar murallas.

  1. Atreverse a hablar

A través de Informativo Vokaribe, Walter y su combo han vinculado a las comunidades en el proceso de registro y seguimiento de los procesos que más los afectan: las obras de infraestructura que quedan a medias, el déficit del espacio público, las promesas incumplidas de la administración… Comenzaron haciendo revisión crítica de medios y luego salieron a la calle y le dieron el micrófono a la comunidad. Al hacerlo, sostiene, activaron procesos de incidencia, al permitir que sea la comunidad misma la que enuncia las tradicionales W’s del periodismo.

  1. Formar para la expresión y construir contextos colectivamente

La operación de Vokaribe se fundamenta en una estrategia de formación en metodologías básicas de periodismo. Este proceso incluye el uso de Google Spreadsheets, a través del cual los reporteros comunitarios van nutriendo matrices de investigación que le permiten a la emisora saber el estado de cada historia y determinar el momento justo para su publicación.  La matriz les ayuda, además, a determinar la reincidencia de ciertos temas, como el problema de los arroyos (peligrosas corrientes de agua producto del desborde de las alcantarillas) o los abusos de Electricaribe (cuestionada empresa de energía, debido a sus altos costos y recurrentes incumplimientos). De algún modo, Google Drive se convierte en un vehículo para construir contextos comunitarios colectivamente, en tiempo real.

  1. Tomar la calle

Sin estrategia de participación, la radio comunitaria es “palabra vacía”, dice Walter. En Vokaribe, la calle y la cuadra son todo. Por un lado, la emisora sale con regularidad de la biblioteca y se asienta en el espacio público. “Mucha gente, cuando te ve, empieza a generar empatía, es una conexión diferente”, asegura. A esto suma el constante mapeo de organizaciones e individuos, la construcción de bases de datos que no solo les permiten darse a conocer, sino seguir conectando con más voces y vehículos de expresión, de La Paz para Barranquilla y el mundo.