Maraton de las mejores historias de Iberoamérica, categoría Imagen. Foto: Joaquín Sarmiento/FNPI.

Video: Maratón mejores historias de Iberoamérica- Categoría Imagen

 

Isabella Bernal (Colombia), Leonardo Vaca (Argentina) y Adriana Zehbrauskas (Brasil), finalistas de la categoría Imagen del Premio Gabriel García Márquez de Periodismo 2018, conversaron con Omar Rincón (Colombia), jurado de tercera ronda del Premio, acerca de cómo realizaron sus trabajos audiovisuales, los retos de contar estas historias y los peligros a los que se expusieron.

Sobre el Premio y Festival Gabo

Es convocado por la FNPI- Fundación Gabriel García Márquez para el Nuevo Periodismo Iberoamericano con el objetivo de incentivar la búsqueda de la excelencia, la innovación y la coherencia ética en el periodismo, con inspiración en los ideales y obra de Gabriel García Márquez y en la dinámica de innovación, creatividad y liderazgo que caracterizan a Medellín, Colombia. El Premio y el Festival son posibles gracias a la alianza público-privada conformada por la Alcaldía de Medellín y los Grupos Bancolombia y SURA con su filiales en América Latina.

Discapacidad y mujeres: dos universos fotográficos en inequidad

Foto: David Estrada Larrañeta / FNPI.

Por Marcy Alejandra Rangel |@MarcyAlejandra

A pesar de que la charla El retrato de la desigualdad tenía como fin último presentar el trabajo de Constanza Portnoy, argentina ganadora de la Beca Oxfam FNPI de periodismo sobre temas de desigualdad, el tema de su investigación sobre discapacidad dio pie para conversar sobre la desigualdad desde dos vertientes: el fotoperiodismo y las minorías.

El Festival Gabo contó para esta cita con otras tres mujeres que formaron parte del jurado que reconoció el trabajo de Portnoy: Claudia Daut, jefe fotografía de Reuters en América Latina (Alemania); Silvia Omedes, directora de la Fundación Photographic Social Vision (España) y Adriana Zehbrauskas, fotoperiodista freelance para Buzzfeed y The New York Times (Brasil). Junto a Jineth Bedoya, subdirectora de El Tiempo (Colombia), crearon con sus intervenciones una lista de prácticas que han llevado a los medios a publicar imágenes que refieren a los lectores una visión homogénea del mundo y otra de recomendaciones para conceptualizar mejores trabajos visuales.

Las mujeres en el fotoperiodismo

El fotoperiodismo no está alejado del pensamiento patriarcal y machista. Según Constanza Portnoy, el oficio es un lugar reservado para los hombres. “Me ha costado hacerme un espacio como mujer, comunicadora social y freelancer”. Daut, como jefe de fotografía en Reuters, afirma que la agencia cada vez más está pendiente de ser mentora de fotógrafas mujeres. “Una mujer no se puede encasillar. No se acercan las mujeres, tienen miedo a veces, pero estamos en un momento político convulso para que las mujeres se levanten y hay que aprovecharlo para dedicarse a algo que originalmente no es femenino”.

A los independientes les acompaña la incertidumbre. “Si yo no hago un trabajo bien hecho hoy, no me van a llamar mañana otra vez” ejemplifica Zehbrauskas para explicar que el fotoperiodismo, independientemente del género, se ejerce de una manera riesgosa laboralmente hablando cuando se hace de manera freelance.

La maternidad. “Hay mujeres que son freelancers y no tienen con quién dejar a sus hijos. Si uno ve los salones de las escuelas de periodismo la mayoría son mujeres, pero eso luego no se ve reflejado en el mercado laboral. Entonces ahí pasa algo que hace que las mujeres no sigan” analiza Zehbrauskas.

Solo el 15% de los fotoperiodistas profesionales son mujeres. Silvia Omedes cuenta que esta es una industria muy masculina, porque hay muchas menos mujeres. “En los premios, hace un par de años que son muy sensibles a la perspectiva de género y en dar visibilidad a trabajos hechos por mujeres. El World Press Photo hace un año está buscando que más mujeres se postulen al premio y después de un año de intentarlo solo ha subido un 1% las postulaciones”.

La sensibilidad. Omedes afirma que los premios son un termómetro para saber cuál es el tipo de historias que se venden en los medios, se publican y difunden. “Cuando uno ve las historias que hacen las mujeres, se da cuenta que son historias distintas porque nuestro imaginario es masculino y las mujeres desarrollan historias con un punto de vista más esperanzador”. Daut agrega: “Debemos ser conscientes que el siglo XX se ha construido con fotografías hechas el 85% por hombres. Debemos tener más mujeres para contar una visión más completa que nos acerque a temáticas que si no nunca serían mainstream, ni se publicarían en los grandes medios para tener una visión más completa. Negar una visión femenina para que nos cuente las historias a las que no tenemos acceso, es como perderse la mitad del mundo”.

Existe una visión homogénea del mundo. Las grandes agencias atienden a intereses económicos y políticos clarísimos y distribuyen las mismas imágenes a cantidades de periódicos en el mundo, con lo cual nuestra idea del mundo es homogénea: regida y creada por un cierto tipo de persona. “Hay que potenciar la diversidad, fotógrafos locales y autóctonos. Cuando hablamos de mujeres, estamos hablando del 50% de la población mundial” recuerda Omedes.

Existe un modelo social discapacitante: Hay dos tipos de limitaciones sobre las que se habló en la charla. Por un lado, la visión de Portnoy sobre la discapacidad: “¿Dónde está esa discapacidad? ¿En la persona que tiene esa discapacidad, o en la sociedad que condiciona e impone barreras para que una persona en silla de ruedas no pueda subir a la vereda o tenga que ser levantada para subir a un medio de transporte?”. Y, por otra, la de Omedes que critica a quienes elaboran narrativas que potencian a la mujer como víctimas: “Las mujeres entramos a los museos y nos vemos desnudas. Tenemos que revisar los clichés, la idea de lo femenino, de la mujer, del género. Si hay que analizar el siglo XX por las imágenes que ha creado es absolutamente incompleto e injusto. Y además nos hemos acostumbrado a ello. Las agencias venden muchas más imágenes si aparece un niño destrozado o una mujer en desesperación, pobreza, refugiada. Eso vende y afianza esa imagen tan difícil de romper de la diversidad”.

Recomendaciones para fotoperiodistas

    1. Contar historias nunca va a estar en crisis, porque es algo que forma parte de la naturaleza humana: “Tenemos que explicarnos el mundo, unos a otros, y las nuevas tecnologías ofrecen las herramientas para difundir estos trabajos” dijo Silvia Omedes.
    2. Estar presentes con el corazón. Evitar lugares comunes de revictimización en las imágenes parte de la empatía, de ponerse en el lugar del otro. “No solamente estar presente con los ojos en esa situación, sino también con el corazón. A veces hay que dejar la cámara. Aunque la imagen que veamos sea perfecta quizá no es la mejor si respetamos esa situación” explicó la fotoperiodista y psicóloga Constanza Portnoy.
    3. Tener presencia en redes sociales. Tener una web cuidada y a pesar de eso entender que no todas las redes sociales están pensadas para colgar proyectos fotográficos con aspiraciones profesionales. Omedes agregó: “Cuando uno siente la pulsión de compartir su historia y esa historia está hecha honestamente, se encontrará la vía para difundir”.
    4. Presentarle el trabajo a un editor. Claudia Daut sugiere preguntarle a un editor qué le parece el trabajo antes de ofrecerlo. “Podemos sentarnos y hablar. De alguna manera se tiene que contactar con alguien que esté en el medio”.
    5. Encontrar los cómplices naturales del proyecto. Saber dónde está la audiencia potencial va a marcar el cómo para explicar el qué. “Cuanto más idea tenemos a priori de dónde está nuestra audiencia, nos va a facilitar el llegar ahí antes” señala Omedes.
    6. Desarrollar el proyecto por escrito. Para ganar la Beca OXFAM – FNPI, Portnoy tuvo que acompañar las imágenes de un texto que defendiera el producto que estaba presentando. Durante el proceso, descubrió que es un lenguaje que no se puede descuidar. “No se complementan, pero van de la mano”. 

Sobre el Premio y Festival Gabo

Es convocado por la FNPI- Fundación Gabriel García Márquez para el Nuevo Periodismo Iberoamericano con el objetivo de incentivar la búsqueda de la excelencia, la innovación, el rigor en el tratamiento de los hechos y la coherencia ética en el periodismo. Está inspirado en los ideales y la obra de Gabriel García Márquez y en la dinámica de innovación, creatividad y liderazgo que caracterizan a Medellín, Colombia. El Premio y el Festival son posibles gracias a la alianza público-privada conformada por la Alcaldía de Medellín y los Grupos SURA y Bancolombia con sus filiales en América Latina.

Las 5 enseñanzas que nos deja la Maratón de las mejores historias de Iberoamérica

Maratón de las mejores historias de Iberoamérica. Foto: David Estrada / FNPI.

Por Marcy Alejandra Rangel | @MarcyAlejandra

El amplísimo escenario del Orquideorama del Jardín Botánico de Medellín es el lugar donde los doce finalistas de las categorías Cobertura, Imagen, Texto e Innovación se dan cita la primera mañana del Festival Gabo. Es una tradición para quienes celebran el periodismo en Iberoamérica escuchar las presentaciones de los trabajos, en carne y hueso, o transmitidas en directo, con las historias detrás de sus trabajos que fueron elegidos finalistas del Premio Gabo 2018.

Temas como la corrupción, la migración, debates sobre la religión, los derechos humanos y sus injusticias son parte de las inquietudes etnográficas de los periodistas y, sobre todo, de los lectores que han permitido –a través de sus lecturas– crear un impacto suficiente para posicionar esos trabajos dentro del espectro del periodismo en la región. Estas son algunas de las enseñanzas que los finalistas compartieron con la audiencia:

Maye Primera (Venezuela), Ginna Morelo (Colombia) y Daniel Moreno (México). Foto: David Estrada/FNPI.

Los periodistas están cada vez más preocupados por el formato

Rosental Alves, miembro del Consejo Rector del Premio Gabo, presentó la Maratón de las mejores hstorias de Iberoamérica en la categoría Cobertura con una premisa: “Es algo muy novedoso en el periodismo que los periodistas estén preocupados por generar impacto en las redes, en otros periódicos, en los formatos, y los tres reportajes hubo un uso de la tecnología práctica para entender la historia”.

Participaron la venezolana Maye Primera, editora de Univisión Noticias para América Latina; la colombiana Ginna Morelo, directora de la Unidad de Datos de El Tiempo; y el mexicano Daniel Moreno, Director General y Fundador de Animal Político.

A pesar de que las historias nominadas hablan de preocupaciones políticas de los países que ocupan, lo que realza las historias es el espíritu colaborativo con el que fueron concebidas. Univisión trabajó con El Faro, El Tiempo en alianza con Efecto Cocuyo y 27 periodistas que viajaron con los migrantes venezolanos desde tres de sus pasos fronterizos, y Animal Político lo hizo en conjunto con Méxicanos contra la Corrupción y la Impunidad y otros 25 medios que publicaron su trabajo, como parte de una estrategia de comunicación para generar mayor impacto en la sociedad y los políticos a los que denunciaron.

Moreno lo resume así: “Un periodista tiene que estar convencido de que un periodista tiene que cazar las audiencias y hay que diseñar estrategias para conquistarlos. Es clave entender que es igual de importante que tanto el responsable de video como el diseño se involucre desde la investigación misma. Que todo el equipo se pregunte: ¿De qué se trata el reportaje y cómo se va a complementar?”.

Joseph Zárate (Perú), Erick Lezama (Venezuela), Julio Villanueva Chang (Perú), Carlos Martínez (El Salvador) / Foto: David Estrada

Si el periodista no asume un riesgo, no puede contar lo que sucede.

Cada categoría del Premio Gabo adquiere un tamiz diferente, a pesar de que los temas de los trabajos puedan coincidir. El de la conversación entre los finalistas de la categoría texto estuvo arropado por la franqueza. Julio Villanueva Chang, director fundador de la Revista Etiqueta Negra, hizo que Joseph Zárate (Perú), Erick Lezama (Venezuela) y Carlos Martínez (El Salvador) leyeran los fragmentos más emotivos de sus crónicas y confesaran cuánto se habían conmovido durante el proceso de escritura. “Siempre hay que cuidar a la gente de sí misma. Lo importante es la gente, y este es un trabajo de empatía y de ponerse en los calzoncillos de otras personas”, señaló Chang.

Los periodistas, a partir de entonces, expusieron sus miedos: “Le permití a mis entrevistados leer la historia antes de publicarla porque se los propuse yo. Me pareció que no valía la pena arriesgar la vida de alguien”; “Es una historia de horror que sentía que podía pasarme a mí, podía pasarle a mi hermana”. A partir de esa sensibilidad, Lezama habló sobre la posibilidad de emocionar al lector contando una vida “común”, en una situación de fragilidad que vulnera al periodista desde su reportería. “Siempre corremos riesgos como periodistas, pero siempre afrontamos esos retos porque de lo contrario no estaríamos contando lo que sucede”. 

Isabella Bernal (Colombia) y Leonardo Vaca (Argentina). Foto: Joaquín Sarmiento/FNPI.
Isabella Bernal (Colombia) y Leonardo Vaca (Argentina) / Joaquín Sarmiento – FNPI.

Lo importante es lo que está detrás de la imagen.

Omar Rincón, crítico de televisión de El Tiempo, llevó la charla de los finalistas de la categoría Imagen al terreno de la informalidad. “¿Qué es lo que hace que una imagen sea periodística?” fue una pregunta que ayudó a desmitificar un poco el uso de la fotografía como herramienta cotidiana de quienes no son fotógrafos pero usan un teléfono inteligente para registrar sus momentos importantes.

“No se puede tomar una buena foto todos los días, en todos los momentos, porque lo importante es lo que está detrás de la foto” explicó Adriana Zehbrauskas, de Brasil, residente en México. Su trabajo nominado está compuesto por fotografías solo tomadas desde el iPhone y que imprime al momento, desde que hizo un trabajo en Guerrero y se dio cuenta de que sus entrevistados no tenían fotos familiares en sus casas.

Leonardo Vaca, de Argentina, apuntó que una fotografía es periodística cuando acompaña el trabajo de sus compañeros periodistas. Isabella Bernal, de Colombia, lo explicó de esta manera: “Una foto debe revelar la historia de mucha gente. No solo las imágenes, sino el periodismo le compete a muchas más personas. Cuando empecé a escribir, la gente me decía ‘tienes que pintar con palabras’. Ahora entiendo que el periodismo merece ser más redondo y no separar ninguna historia donde haya foto, video o texto”. 

Pere Ortín (España) en conversación con Carola Solé (España) / Foto: Joaquín Sarmiento – FNPI

Innovar es permitir que los lectores saquen sus propias conclusiones.

Carola Solé y Mari Luz Peinado, de España, y Juan Heliborn de Paraguay conversaron con Pere Ortín, director de Altair Magazine, sobre la innovación es sus trabajos.

Todos contestaron por qué consideran que su trabajo es innovador. El Surtidor, donde trabaja Heliborn, defiende la flexibilidad de los medios nativos digitales y explica que la innovación “parte de la desesperación y la carencia de recursos” y es “mezclar cosas que la gente hace muy bien para que funcionen en el periodismo”, mientras que Solé habla de la dificultad de innovar en un medio grande como AFP. “No son solo los datos en sí, es que los datos cuenten historias y que el público interactúe con esas historias y que sean una excusa para abordar lo que queremos de manera relevante”.

Finalmente, la innovación en el trabajo de Peinado, en Verne, fue hablar de un tema tabú como la menstruación en diferentes formatos que visibilizaran cada uno las infinitas historias que hay sobre este tema. “En este proyecto ha sido muy importante el feedback de los lectores. Distintos lenguajes para contar cómo la cultura pop ha influido en nuestra visión. Mientras quede claro que tiene una base rigurosa, porque estamos hablando de proyectos periodísticos, todo va a estar bien”.

Mari Luz Peinado, finalista del Premio Gabo / Foto: Julián Roldán – FNPI

No hay que tener miedo a que los proyectos salgan mal.

Mari Luz Peinado, finalista en la categoría Innovación, culminó su charla con un consejo para todos los periodistas: “Probar con los nuevos temas: no hay que tener miedo a que los proyectos salgan mal, porque, ¿qué significan que salgan mal? ¿Qué se lean poco? Pues a veces los temas se tienen que leer poco para poder seguir”.

 

Sobre el Premio y Festival Gabo

Es convocado por la FNPI- Fundación Gabriel García Márquez para el Nuevo Periodismo Iberoamericano con el objetivo de incentivar la búsqueda de la excelencia, la innovación y la coherencia ética en el periodismo, con inspiración en los ideales y la obra de Gabriel García Márquez, y en la dinámica de innovación, creatividad y liderazgo que caracterizan a Medellín, Colombia.

El Premio y el Festival Gabo son posibles gracias a la alianza público-privada conformada por la Alcaldía de Medellín y los grupos Bancolombia y SURA con su filiales en América Latina.

Video: Entrevista con Adriana Zehbrauskas, finalista de Premio Gabo – Categoría Imagen

Tras su participación en la Maratón de las mejores historias de Iberoamérica, en la categoría Imagen, la brasileña Adriana Zehbrauskas, una de las finalistas, nos contó su experiencia durante la producción de su trabajo fotoperiodístico Un albergue en Ciudad de México para mujeres que fueron trabajadoras sexuales.

*Esta entrevista hace parte del cubrimiento especial que los estudiantes de Comunicación Social de la Universidad Tecnológica de Bolívar realizan del Festigabo 2018.