Festival Gabo en el Caribe

‘Es un buen momento para producir documentales’: Caio Cavechini

Por José Luis Rodríguez R. / @UninorteCO

Caio Cavechini, periodista y documentalista brasileño, ganador en 2016 del Premio Gabo – Categoría Imagen, por el documental Jaci: siete pecados de una obra amazónica, hizo parte de la jornada de charlas del Festival Gabo en el Caribe, desarrollada el 8 de agosto en la Universidad del Norte. En entrevista con el docente Alfredo Sabbagh, Cavechini explicó a los asistentes cómo enfoca su labor como periodista audiovisual y compartió detalles sobre los procesos creativos en su trabajo.

La obra de Cavechini se cuida de influir directamente con la cámara, defendiendo siempre un estilo observacional. Entre su trabajo se destaca Carne y hueso, un documental sobre el trabajo en frigoríficos, que pasó por festivales de cine como Es todo verdad, Gramado (Brasil), Fidocs (Chile) y DOK Leipzig (Alemania). En 2017 fue otra vez finalista del Premio Gabo por el trabajo Entre los hombres de bien, un documental sobre la crisis de representatividad y polarización de la política brasileña que también recibió premios en Brasil, Portugal y México.

Alfredo Sabbagh: ¿Es bueno hablar del documental periodístico como una novedad o debemos alegrarnos que, independientemente de ese matrimonio documental-periodismo, estamos viviendo un buen momento para el documental?

Caio Cavechini: Sí, es un buen momento tanto por la facilidad tecnológica para hacerlo y exhibirlo, hasta por Whatsapp se puede recibir y ver un corto. Entonces, creo que es un momento único para los que se interesan por el periodismo audiovisual, por reportajes en televisión o documentales más clásicos de cine. Pueden obtener muchas referencias, ejemplos y tomar un camino que sea suyo. Cada proyecto te obliga a pensar diferente, porque todos los temas están ahí, tratados diariamente.

A.S.: En una entrevista anterior hacías referencia al periodista y documentalista Jon Alpert, que dice que para hacer un documental hay que tener tres cosas primordiales: tiempo, pasión y acceso. ¿Cómo sacar el tiempo, no perder la pasión y asegurar el acceso?

C.C.: Cada proyecto exige su tiempo. El acceso es la dinámica del trabajo, el día a día, mostrando tus trabajos anteriores. Seguir intentado mostrar tu trabajo para tener acceso. La pasión es muy personal. Los temas muchas veces nos llaman para hacer algo que no es nuestro trabajo diario.

A.S.: ¿Cómo el tema de Entre los hombres de bien te apasionó?

C.C.: Fue el comienzo de las manifestaciones en Brasil, en 2013. Las calles se tomaron para protestas. Fue la primera vez que en el Congreso Nacional emergió la figura de los religiosos y de ultra conservadores con temas de las costumbres. Siempre hubo conservadores en el congreso, pero hay un nuevo tipo de conservadurismo más ligado a las costumbres, a la familia y a ese tipo de discurso. Entonces se dio ese choque de una juventud que traía otras inquietudes y ese conservadurismo.

En la sala se proyectan varios minutos del documental Entre los hombres de bien. El largometraje acompaña los pasos del diputado Jean Wyllys, portavoz de la causa LGBT en un conservador congreso nacional de Brasil, y traza el perfil de un personaje singular. Un trabajo que muestra la crisis de representatividad y la polarización de la política brasileña.

A.S.: Este documental es la historia de un personaje que siguieron por varios años. Grabaron cientos de horas que se condensan en una hora y cuarenta minutos. ¿Cómo se “negocia” la historia que está en cientos de horas vs las decisiones que se toman en la sala de montaje para contárnosla en una hora y cuarenta minutos?

C.C.: Es un proceso muy dinámico que no se hace de un día para otro. Fueron tres o cuatro meses, haciendo cortes, mostrando a un grupo de amigos y regresando a la sala de edición. Pero hay cosas que sabes desde el comienzo que van a entrar, como la discusión con el pastor en el congreso. Eso fue en el primer día de grabación. Cuando vimos eso creímos que tendríamos dos años de peleas así, pero pasaron los años y no pasó otra frente a la cámara. Entonces de eso también se trata el documental: estar en el sitio con la cámara lista. Fueron siete cortes antes del corte final.

A.S.: La historia de Jean termina contándose a partir de la escogencia de ustedes como realizadores, incluso desde la escogencia de dónde poner la cámara se plantea una manera de contar esa historia. ¿Hasta dónde es la historia de Jean y hasta dónde es la historia que Caio quiere contar de Jean?

C.C.: Hay documentales en los que tu presencia como director está más explícita y en otros un poco menos. En este caso un poco menos, porque estamos en un documental de mucha observación, pero siempre es nuestra mirada. Una mirada sobre lo que pasó en esos años no solo en la vida de Jean sino también en el congreso de Brasil. Nuestra mirada sobre esa polarización, muchas de las frases que se escuchan al comienzo son del actual presidente de Brasil.

A.S.: ¿Qué ha cambiado en la mirada de Caio sobre la realidad? ¿Cómo ha evolucionado el documentalista y el periodista desde su primer trabajo?

C.C.: Difícil, ahora soy padre, entonces hay historias que me llaman más la atención por pensar en el futuro. Es muy dinámico, a veces pienso que es importante recuperar la mirada de la pasión, de mirar las cosas con el interés y la curiosidad que tenía. A veces pienso que el Caio de hace algunos años era un poco pesimista, no pensaba mucho en el futuro. Los seres humanos somos muy complejos para definirnos a nosotros mismos (ríe).

A.S.: Comentabas también en una entrevista anterior, lo decías incluso como consejo, que cuando uno empieza a abordar un proyecto documental es importante ver qué se ha hecho al respecto para tener contexto e intentar explorar de manera distinta esa realidad. ¿Dentro de esos autores y experiencias que has explorado, hay algún estilo o autor que te haya marcado consciente o inconscientemente?

C.C.: Hay una cosa que es más básica y es importante para la mayor parte de la audiencia. Como periodista recibo muchos trabajos documentales y reportajes, y siempre siento que por esa proactividad todos los periodistas empiezan grabando muchas entrevistas. Antes de saber a quién entrevistar, el documental exige cómo vamos a observar. Debemos dejar pasar el flujo de la realidad ante la cámara para que el tema aparezca frente a nosotros. Los documentales tanto de estudiantes como de personas con experiencia son cada vez más entrevistas y no observacionales.

A.S.: ¿Qué viene para Caio, en qué estás trabajando?

Hay ahora un proyecto en el que no soy el director y trabajo con un montajista sobre agrotóxicos en Brasil, con la misma organización de Carne y hueso. Documentales míos por el momento no, vamos a esperar a que los niños crezcan.

Sobre el Festival Gabo en el Caribe

El Festival Gabo es una iniciativa de la Fundación Gabo, que se realiza anualmente en Medellín gracias a la alianza público-privada conformada por la Alcaldía de Medellín y los Grupos Bancolombia y SURA con sus filiales en América Latina. La primera jornada del Festival Gabo en el Caribe fue organizada por la Fundación Gabo y la Universidad del Norte, y se realiza en el marco del juzgamiento del Premio Gabo 2019, que cuenta con el apoyo de la Fundación Surtigás.

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Para el documental todavía hay un gran público: Caio Cavechini

Las producciones de largo aliento son la esencia del trabajo de Caio Cavechini, quien estará en el Festival Gabriel García Márquez de Periodismo en una conversación sobre esta otra manera de ejercer el oficio y proyectará tres documentales: Cartas para un ladrón de libro, Carne y Hueso y Entre los hombres de bien. El brasileño nos entrega unas claves para acercarnos al tema.

Caio Cavechini tiene claro que no existe una fórmula mágica para realizar un documental exitoso, pero sabe que con tiempo, acceso y pasión el producto de cualquier investigación periodística puede estar cerca de ser no solo un producto de calidad, sino que le interese al gran público.
Esta lección la aprendió hace unos diez años en un taller con el estadounidense Jon Alpert, para esa época documentalista ya experimentado, mientras Caio daba sus primeros pasos en esta faceta del periodismo.

“Debe tener tiempo de dedicación, de investigación, para que la historia pueda ser contada de forma más completa. Acceso a las personas, las fuentes, los lugares, para podernos involucrar como espectadores en esa parte de la realidad que se propuso. Y pasión por el tema, es una actividad que no se hace todos los días, sino durante un tiempo, y hay que tener un poco de ganas personales para dedicarse y sacrificar muchas cosas, porque como un libro u otros procesos largos, exige un sacrificio personal y por es necesario sentir esa pasión”, resalta Caio Cavechini sobre los preceptos obligatorios para este tipo de trabajos.

El brasileño estará en el campus de La Floresta del Instituto Tecnológico Metropolitano (ITM), el próximo jueves 4 de octubre a partir de las 4 de la tarde. Allí hablará con el argentino Alberto García Ferrer, cinematógrafo, sobre el lugar de este tipo de cine de en el periodismo cultural actual. Este conversatorio es una de las actividades que se realizará en centros de educación superior de Medellín, durante la sexta edición del Festival Gabo, que empieza el miércoles 3 de octubre.

Con más de una década de experiencia y por lo menos nueve trabajos de largo aliento, entre dirigidos y escritos, que le han merecido galardones como el Premio Gabo, categoría Imagen, en 2016; Cavechini no se siente un maestro de su oficio, pero es contundente al reclamar cambios en las escuelas de periodismo.

“El cambio en la formación en este tiempo de competencia con la información instantánea no es algo solo para las escuelas de periodismo, también es necesario para los niños y jóvenes que están en educación básica, es decir, hay que repensar la educación en general”, asegura.

Pero ya en el campo de la comunicación, considera que “en la enseñanza del periodismo me parece muy relevante tener profesionales en constante actualización. Por eso valoro mucho las iniciativas de la Fundación Gabriel García Márquez, porque son unos espacios de encuentro de profesionales interesados en reflexionar acerca del momento del periodismo”.

Y explica que “el ritmo de una carrera universitaria no lo deben llevar solo los profesores dedicados exclusivamente a la academia. Es verdad que para que una persona llegue a ser un maestro titular de una universidad, debe dar muchas clases, publicar en revistas especializadas (científicas), investigar mucho.

Pero para la enseñanza del periodismo hay que buscar espacios no solo para estos profesores, sino espacios para otros profesionales, que estén más corto tiempo en la academia, con charlas, conferencias, algunas cátedras, profesionales que puedan ir a la universidad a apoyar a los estudiantes y profesores y hacer que las universidades sean espacios abiertos también para otro tipo de profesionales, además de los maestros”.

Sobre el trabajo del investigador, sea el que se dedica a un asunto para escribir un libro, hacer un documental o difundirlo en cualquier otro formato, Caio Cavechini considera que “es un recurso necesario no solo para los periodistas, sino también para el público. De tiempo en tiempo encontrar información más consolidada, profunda, con contexto, con historias particulares, mejor contadas, eso le gusta a la gente”.

Y resalta que “todo esto depende mucho del periodista involucrado, que por su curiosidad, su pasión por un tema, pueda hacer sugerencias y se dedique a explorar más, que salga un poco de su rutina y dedique un tiempo a uno de los temas a los que se enfrenta cada día. Y busque datos, informaciones que muchas veces no encuentran espacio para publicar en las notas diarias, para poder llegar al público”.

Pero, como le ha sucedido a él, muchas veces los investigadores se tropiezan con grandes obstáculos y por eso aconseja que “cuando vas a tratar un tema en el que vas a tocar o incomodar poderes políticos o económicos, lo más importante es no estar solo, no solo en lo personal sino también de manera institucional. Hay que conquistar apoyo de redes locales, de movimientos sociales, de otros periodistas.

Si se trabaja en un medio, es importante acercarse a otras instituciones que han abordado un determinado problema social o político. Y también hay que tener paciencia. Solo no vas a poder cambiar el mundo y mucho menos enfrentar a todos. Con la búsqueda de estos apoyos el trabajo queda mejor hecho y su repercusión puede ser mayor”.

Cavechini reitera su confianza en que estos trabajos de largo aliento aún tienen espacio en la era actual. “Es difícil saber si las cadenas en las redes sociales o lo los memes van a dominar el consumo de información en mediano o largo plazo, si las personas van a creer más en sus propios círculos de información o en el periodismo profesional. Lo que yo espero es que la gente quiera seguir conociendo historias diferentes, que se les pueden presentar en documentales como largometrajes o series, o también como libros”.

Y añade que “por más que el periodismo diario se intente adecuar a ese tiempo de consumo cada vez más rápido, en el que las personas están informadas a través de Facebook, Instagram, Snapchat, también debe mirar que hay un público con más tiempo, al que se debe buscar para ofrecerle contenidos de mayor duración, no solo como películas o series de ficción, también documentales. Esa es mi esperanza”.

Caio Cavechini en el Festival Gabo

El documentalista también estará en la charla Caio Cavechini: ¿un documental se concluye o se abandona?, en la que hablará con Sylvia Colombo, corresponsal de Folha de S.Paulo para América Latina, sobre la influencia que ha tenido la coyuntura brasileña en su obra y sobre la investigación que realizó durante casi cinco años a uno de los ladrones de libros más inquietantes de Brasil, el miércoles, 3 de octubre, en el Salón Restrepo del Jardín Botánico a las 6:30 p.m. Posterior a la charla se proyectará su documental Cartas para un ladrón de libros.

Así mismo, el 4 de octubre se proyectará el documental Carne y Hueso, en el Salón Restrepo del Jardín Botánico a las 6:00 p.m.; y el viernes se hará la proyección de Entre los hombres de bien, en el Museo de Arte Moderno de Medellín a las 7:30 p.m.

Sobre el Premio y Festival Gabo

Es convocado por la FNPI- Fundación Gabriel García Márquez para el Nuevo Periodismo Iberoamericano con el objetivo de incentivar la búsqueda de la excelencia, la innovación y la coherencia ética en el periodismo, con inspiración en los ideales y la obra de Gabriel García Márquez, y en la dinámica de innovación, creatividad y liderazgo que caracterizan a Medellín, Colombia.

El Premio y el Festival Gabo son posibles gracias a la alianza público-privada conformada por la Alcaldía de Medellín y los gruposSURA y Bancolombia con su filiales en América Latina.

Por Carlos Olimpo Restrepo S.

No te pierdas las muestras que trae el Festival Gabo 2018

Foto: Imagen promocional de ‘Entre los hombres de bien’, documental codirigido por Caio Cavechini.

El documental, el fotoperiodismo y la interpretación musical tendrán espacio en el Festival Gabriel García Márquez de Periodismo 2018, que se llevará a cabo en Medellín, Colombia, del 3 al 5 de octubre.

Los espectadores podrán recorrer la exposición fotográfica Africamericanos, ver tres largometrajes periodísticos del director invitado Caio Cavechini y disfrutar de una tertulia musical en homenaje a Gabo.

Las muestras del Festival Gabo se realizarán en el Jardín Botánico y en el Museo de Arte Moderno de Medellín. Al igual que las charlas del Premio y Festival Gabo, estas exhibiciones son de entrada libre (hasta completar aforo) con previa inscripción en el sitio web del evento.

Conoce a continuación la programación de muestras del Festival Gabo:

Muestra fotográfica: Africamericanos
Miércoles 3 a viernes, 5 de octubre – Todo el día

Senderos del Jardín Botánico

Esta muestra colectiva, que estará en el Jardín Botánico de Medellín durante los tres días del Festival Gabo, ofrecerá un recorrido visual a través de la mirada de seis autores que han centrado su producción en reflejar señas de identidad de la diáspora africana en Latinoamérica.

Incluye fotografías de: Liliana Angulo (Colombia), Maya Goded (México), Sandra Eleta (Panamá), Jorge Panchoaga (Colombia), Cristina de Middel (España) y Bruno Morais (Brasil).
CuraduríaClaudi Carreras (España) y Germán Rey (Colombia).

Charla: Africamericanos
Viernes, 5 de octubre – 10:00 a.m. – 11:00 a.m.

Liliana Angulo (Colombia), Bruno Morais (Brasil), Claudi Carreras (España) en conversación con Ángel Unfried (Colombia).

Orquideorama – Jardín Botánico

El imaginario visual sobre las poblaciones de afrodescendientes en América Latina está impregnado por estereotipos reduccionistas, y difícilmente dimensiona la importancia de la pulsión africana que atraviesa el continente americano de norte a sur. Históricamente se han producido procesos de invisibilización, blanqueamiento, ocultación y deconstrucción de la figura de esta comunidad en toda la región. En esta exposición se hará un recorrido visual a través de la mirada de seis autores que han centrado su producción en reflejar señas de identidad de la diáspora africana en Latinoamérica.

Charla: ¿Un documental se construye o se abandona?
Miércoles, 3 de octubre / 6:00 p.m. – 6:45 p.m.

Caio Cavechini (Brasil) en conversación con Sylvia Colombo.

Salón Restrepo – Jardín Botánico

Sylvia Colombo, corresponsal de Folha de S.Paulo para América Latina, entrevistará al documentalista Caio Cavechini sobre la influencia que ha tenido la coyuntura brasileña en su obra y sobre la investigación que realizó durante casi cinco años a uno de los ladrones de libros más inquietantes de Brasil.

Proyección: Cartas para un ladrón de libros
Miércoles, 3 de octubre / 6:45 p.m. – 8:30 p.m.

Salón Restrepo – Jardín Botánico

Este documental narra, a lo largo de cinco años, la trayectoria de Laéssio Rodrigues de Oliveira, un empleado de panadería considerado por las autoridades brasileñas el mayor ladrón de libros raros en el país.

Dirección: Caio Cavechini y Carlos Juliano Barros (2018).
Idioma: Hablado en portugués con subtítulos en español.

Proyección:  Carne y hueso
Jueves, 4 de octubre / 6:00 p.m. – 7:15 p.m.

Salón Restrepo – Jardín Botánico

Este documental da cuenta de la situación laboral en las industrias procesadoras de proteína animal en Brasil. Relata, a lo largo de dos años, las historias de empleados de frigoríficos: los accidentes, enfermedades y otros problemas que han sufrido en sus vidas personales a causa de la naturaleza dura, intensa y repetitiva de este trabajo.

Este trabajo fue ganador del Premio Gabo 2016 categoría Imagen.

Dirección: Caio Cavechini y Carlos Juliano Barros para Repórter Brasil – Globo News (2015).
Idioma: Hablado en portugués con subtítulos en español.

Proyección: Entre los hombres de bien
Viernes, 5 de octubre / 7:30 p.m. – 8:45 p.m.

Museo de Arte Moderno de Medellín MAMM

Jean Wyllys es más que un ser raro en un conservador congreso nacional de Brasilia. Este documental acompaña los pasos del diputado, portavoz de la causa LGBT, y dibuja el perfil de un personaje singular, en un trabajo  que muestra la crisis de representatividad y la polarización de la política brasileña.

Este trabajo fue finalista del Premio Gabo 2017 categoría Imagen.

Dirección: Caio Cavechini y Carlos Juliano Barros (2016).
Idioma: Hablado en portugués con subtítulos en español.

Tertulia musical en homenaje a Gabo: los vallenatos de Leandro Díaz
Viernes, 5 de octubre / 7:00 p.m. a 8:30 p.m.

Ivo Díaz (Colombia), Ariel Castillo (Colombia) y Marina Quintero (Colombia) en conversación con Alonso Sánchez Baute (Colombia).

Orquideorama – Jardín Botánico

¿Qué tuvieron en común Gabriel García Márquez y el poeta e intérprete vallenato Leandro Díaz? En este espacio de íntimas anécdotas y clásicos temas musicales interpretados por el hijo de Leandro, Ivo Díaz, tres estudiosos de las obras de ambos maestros recorrerán fragmentos, recuerdos, fotografías, videos y poemas hasta llegar al corazón de una legendaria amistad vallenata.

 

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Sobre el Premio y Festival Gabo

Es convocado por la FNPI- Fundación Gabriel García Márquez para el Nuevo Periodismo Iberoamericano con el objetivo de incentivar la búsqueda de la excelencia, la innovación y la coherencia ética en el periodismo, con inspiración en los ideales y la obra de Gabriel García Márquez, y en la dinámica de innovación, creatividad y liderazgo que caracterizan a Medellín, Colombia.

El Premio y el Festival Gabo son posibles gracias a la alianza público-privada conformada por la Alcaldía de Medellín y los grupos Bancolombia y SURA con su filiales en América Latina.

 

Caio Cavechini

Taller Documentales de actualidad: nuevos y viejos lenguajes para periodismo de largo formato

Este taller ofrecerá algunas referencias de trabajos audiovisuales, debatiendo sus errores, aciertos y posibilidades, para reflexionar acerca de la intersección entre periodismo y narrativa documental. A partir de ejemplos (documentales, cortometrajes, reportajes y largometrajes), hablaremos desde las estrategias para enfocar un tema hasta las decisiones en la sala de edición, entendiendo que para un documental no existe fórmula, y cada proyecto exige una nueva reflexión.

El uso de técnicas de storytelling en todos los campos audiovisuales, incluyendo la publicidad y el llamado branded content, además del abaratamiento de las tecnologías, demuestran la fuerza de la narrativa documental, al tiempo que obligan a sus creadores a huir de nuevos clichés. Para ello es fundamental debatir las posibilidades de usar nuevos lenguajes dentro del llamado documental de actualidad, sus cuestiones técnicas y su relación con formatos como el noticiero.

El Festival Gabo tiene otros talleres que te pueden interesar, consúltalos en este enlace

Dirigido a:

Periodistas, estudiantes, videógrafos y otros profesionales de comunicación que trabajen en audiovisuales.

Serán seleccionados 60 participantes entre quienes postulen. Se tendrá en cuenta el perfil o proyección profesional, la pertinencia del taller para contribuir a ese perfil y la razón específica para querer tomarlo. El formulario de inscripción tiene campos para que esos elementos queden consignados. Para conformar el grupo final también se tendrán en cuenta criterios de equilibrio entre países, regiones y género. A los seleccionados se les enviará a su correo electrónico un mensaje de confirmación donde se indicará todo lo relacionado con la actividad.

Conduce: Caio Cavechini

Es periodista formado por Eca-USP y documentalista con películas que pasaron por importantes festivales de cine de Brasil y del exterior. Desde 2006 forma parte del equipo de Profesión Reportero, programa semanal de Globo nominado para los Emmy Awards en 2012. Como reportero, participó en coberturas que van del terremoto en Haití a la violencia urbana en las ciudades brasileñas, del conflicto en Gaza a las inundaciones históricas en Santa Catarina y en el Acre. Hace cuatro años ejerce el cargo de editor ejecutivo.

Como documentalista, Caio Cavechini dirigió Carne, hueso, sobre el trabajo en frigoríficos, que pasó por festivales de cine como Es Todo Verdad, Gramado (Brasil), Fidocs (Chile) y DOK Leipzig (Alemania). El corto La Casa de la Vó Neyde fue premiado en la Mostra Internacional de Cine de São Paulo. El largometraje Jaci: siete pecados de una obra amazónica recibió el premio Gabriel García Márquez de Periodismo Iberoamericano. Entre los hombres de buena recibió los premios en Brasil, Portugal y México. Su último trabajo, Cartas para un Ladrón de Libros cuenta la historia del mayor ladrón de libros raros de Brasil.

Día: jueves, 4 de octubre
Cupos: 60 participantes
Hora: 9:00 a.m. – 1:00 p.m.
Lugar: Medellín, Colombia
Fecha de cierre de inscripciones: miércoles, 22 de agosto
Fecha de publicación de seleccionados: viernes, 31 de agosto
Contacto del taller: Silvia Navarro (snavarro@fnpi.org)

Inscripciones cerradas.