Tres guerreras del periodismo, tres transformadoras del oficio

Las periodistas María Elena Salinas, Natalia Viana y Jineth Bedoya contaron cómo han dejado atrás la discriminación para abrirse camino en el oficio periodístico.

Fotos: Valeria García /Estudiante de Comunicación Social UTB

Por Karen Flórez / Estudiante de Comunicación Social UTB

“El machismo es lo que más detesto en este mundo. Toda mi obra es una condena larga y constante de esa actitud, porque el machismo es la peor desgracia que tenemos en América Latina y particularmente en el Caribe”: Gabriel García Márquez, 1989.

Con esta célebre frase del Nobel colombiano se inició la charla ‘Ellas, transformadoras del periodismo’, en el que las destacadas periodistas María Elena Salinas (EE.UU./ México), Natalia Viana (Brasil) y Jineth Bedoya (Colombia) conversaron con la también periodista Mabel Lara (Colombia) sobre los retos que enfrentan a diario en su rol de reporteras y cómo han logrado abrirse camino en un oficio en el que históricamente han mandado los hombres.

Las tres periodistas contaron que en algún momento de sus carreras han sido discriminadas. Especialmente, la colombiana Jineth Bedoya, quien fue abusada sexualmente en el 2000 por integrantes de un grupo paramilitar, quienes la secuestraron en la entrada de una cárcel de Bogotá.

Después de ese hecho que marcó su vida, Bedoya (periodista del diario bogotano El Tiempo)  creó la campaña ‘No es hora de callar’. Contó su experiencia para empoderar a las mujeres y convertirse en la cabeza visible de un movimiento que lucha contra el machismo en toda Colombia.

A su turno, la mexicoamericana María Elena Salinas recordó que las mujeres pueden hacer lo mismo que los hombres, porque no hay temas ni oficios vedados para las reporteras.

“Las mujeres podemos hacer lo mismo que los hombres, aunque lo hacemos mejor porque lo hacemos en tacones”, dijo Salinas, generando vitoreos en el auditorio.

Pero para triunfar, Salinas recordó una máxima vital: “No hay que ser mediocre, ni conformista, por eso me exigí más de lo que me pedían en el trabajo. Todos tenemos la misma capacidad para superarnos en el día a día”.

Natalia Viana, periodista de investigación del portal de periodismo brasileño Agencia pública, contó cómo le apuesta con su trabajo a la igualdad de género y a intentar aportar un granito de arena para lograr cambios estructurales en la sociedad de su país.

Sin embargo, resalta que no se siente cómoda con todas las actitudes del feminismo y que, antes, incluso no se consideraba feminista. Pero, tras experiencias personales entendió que sí lo era.

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Este texto hace parte del cubrimiento especial que los estudiantes de Comunicación Social de la Universidad Tecnológica de Bolívar realizan del FestiGabo 2018 #UTBenFestiGabo.

Autenticidad, la clave común entre el buen periodismo y la buena cocina

El chef Andoni Luis Aduriz, del famoso restaurante Mugaritz, uno de los invitados al primer panel que se realizaba en el Festival Gabo sobre periodismo culinario. Foto: Joaquín Sarmiento / FNPI. 

Por: Hernán Restrepo | @hrestrepo  

Dos de los más reconocidos chefs de Iberoamérica se dieron cita al cierre del primer día del Festival Gabo, para discutir con tres periodistas especializados en crítica gastronómica sobre el concepto de verdad en las historias sobre comida.

La chef colombiana Leonor Espinosa y el español Andoni Luis Aduriz, en un panel moderado por el Benjamín Lana, debatieron sus preocupaciones sobre la cocina y los comensales actuales con Julián Estrada de Colombia, y Ocarina Castillo, antropóloga venezolana.

Aquí, las principales ideas compartidas durante la charla:

Lo que el lector y el comensal esperan es autenticidad: Benjamín Lana

Hay un ansia por defender la verdad. Lo demuestran palabras que usamos para describir alimentos como puro, sostenible, auténtico, y orgánico. Todas son palabras que buscan el origen, la verdad. No es casualidad que la palabra y la comida comparten un lugar común, que es la boca. Citando ‘El dilema del omnívoro’ de Michael Pollan, un libro que se mencionó varias veces durante la charla, Benjamín recordó que comida no es lo mismo que alimento.

No nos quedemos en el paisaje que está servido sobre la mesa: Ocarina Castillo

Quienes escribimos sobre cocina no podemos quedarnos en el espectáculo. Es necesario ir más allá del plato y del restaurante que tratamos de describir. Debemos entender el proceso alimentario que permite que el producto vaya desde el lugar donde se produce, hasta llegar al emplatado. Todo ese proceso es importante para darle a las despensas originarias el respeto que merecen. Al hacerlo, no olvidemos poetizar la cocina. Es decir, esforzarnos por que el relato sobre comida transmita valores, sentimientos y nuevas memorias.

El comensal ha cambiado: Julián Estrada

La nutrición, la dietética y la ingeniería de alimentos son nuevas ramas de la cocina que han modificado la forma en que se comporta el comensal moderno. Este comensal es hipocondríaco y narcisista. Se preocupa más por las calorías que contienen los alimentos, que por su sabor. Esto es una mentira tan grande como lo son las palabras de moda ‘light’ y ‘gourmet’.

Las historias sobre cocina son la historia de un país: Leonor Espinosa

El afán por estar a la par de las tendencias y las modas en la forma de cocinar nos ha llevado a servir mentiras, a una cocina equívoca. Contar la historia sobre un ingrediente, sin vivirlo, ya es una mentira. Son muchos los cocineros que se han tratado de apropiar de las recetas e ingredientes autóctonos, sin vivir las regiones de donde provienen. Los ingredientes se sienten, y plasmarlos en un plato debe ser una vivencia.

El proceso gastronómico es todo, menos simple: Andoni Luis Aduriz

Hay quienes dividen el mundo en blanco y negro. Por ejemplo, entre quienes saben contar historias y los que no. El que sabe contar historias es el que se lleva a la rubia en el bar, es cierto. Pero el mundo de la cocina no es tan simple. Sin embargo, hemos tratado de simplificar con generalizaciones a la comida. Por ejemplo, creemos que todas las abuelas son grandes cocineras, lo cual es una mentira.

El creador del restaurante Mugaritz enumeró otras mentiras culinarias: que el sabor es lo primero. Que como aquí no se come en ningún sitio. Que las cosas tienen que saber a lo que son. Que la cocina se explica por sí sola, no hace falta que la cuentes. Pero lo cierto es que detrás de la cocina siempre habrá historias que necesitan ser contadas. Sin historias, un restaurante está vacío, es solo materia.

Los falsos ‘foodies’, una plaga

Leonor contó la historia de aquella vez en la que una mujer, con más de 600 mil seguidores en Instagram, le escribió por mensaje privado para tratar de chantajearla. Pedía que la invitara a ella y a su esposo su restaurante a cambio de hacer una publicación favorable. Para Leonor, corren peligro los chefs y cocineros que se dejan llevar por los comentarios de los consumidores egocéntricos que no saben reconocer la comida auténtica, estos falsos ‘foodies’ e influenciadores de redes sociales que no son comensales de verdad.

Los programas sobre cocina han estereotipado a los cocineros

Los panelistas coincidieron en señalar que los ‘reality shows’ donde los chefs se convierten en jueces de aprendices, han hecho un daño terrible a la imagen de quienes se dedican a la cocina. Ahora se les percibe como implacables y fríos seres sin corazón, que reflejan esto en su forma de cocinar y administrar como tiranos sus restaurantes.

https://www.facebook.com/festivalgabo/videos/2044407505871682/

Sobre el Premio y Festival Gabo

Es convocado por la FNPI – Fundación Gabriel García Márquez para el Nuevo Periodismo Iberoamericano, con el objetivo de incentivar la búsqueda de la excelencia, la innovación y la coherencia ética, con inspiración en los ideales y obra de Gabriel García Márquez y en la dinámica de creatividad y liderazgo que caracterizan a Medellín, Colombia. El Premio y el Festival son posibles gracias a la alianza público-privada conformada por la Alcaldía de Medellín y los Grupos SURA y Bancolombia con sus filiales en América Latina.

Video: entrevista con Ginna Morelo, finalista del Premio Gabo categoría Cobertura

Ginna Morelo, editora de la Unidad de Datos de el diario El Tiempo y una de las realizadoras de Venezuela La Fuga, trabajo finalista del Premio Gabo categoría Cobertura, nos narra la travesía que deben realizar a diario más de mil venezolanos que se van de su país en busca de un mejor futuro.

*Esta entrevista hace parte del cubrimiento especial que los estudiantes de Comunicación Social de la Universidad Tecnológica de Bolívar realizan del Festival Gabo 2018.
Sigue el Festival Gabo en directo

Así será el segundo día del Festival Gabo 2018

La entrega del sexto Premio Gabriel García Márquez de Periodismo es el evento central del segundo día del Festival Gabo, que tiene lugar en Medellín del 3 al 5 de octubre de 2018. Los ganadores se darán a conocer en una ceremonia que tendrá lugar en el Orquideorama del Jardín Botánico a partir de las 8:00 p.m.

Es alrededor de este galardón, considerado uno de los más prestigiosos del periodismo en Iberoamérica, que se ha conformado este año una amplia programación de tres días con 75 actividades y más de 150 invitados, con el fin de generar un diálogo entre el periodismo, la ciudadanía, la cultura y la tecnología.

Exceptuando la ceremonia del Premio Gabo, la entrada a todas las actividades es libre hasta llenar aforo. Si no puedes asistir, consulta aquí cómo puedes seguir la transmisión en directo de los eventos del Festival Gabo por Facebook Live y festivalgabo.com.

La programación del segundo día comenzará en el Orquideorama del Jardín Botánico, a las 9:00 a.m, con Diego Martínez Lloreda, director de información de El País de Cali y flamante ganador del Reconocimiento Manuel Zabala al editor colombiano ejemplar, quien compartirá con la audiencia y los periodistas Luz Marina Tobón y Santiago Gamboa sus visiones e ideas como periodista, formador y ciudadano. Al final de la mañana hará lo propio Ignacio Escolar, ganador del Reconocimiento a la Excelencia, en conversación con Natalia Viana y Jean-François Fogel.

Desde las 2:30 p.m. se abrirá en el Salón Restrepo del Jardín Botánico un espacio para que los asistentes conversen sin intermediarios ni moderadores con los creadores de importantes proyectos periodísticos innovadores, como Data Cívica y Pictoline. Al final de la tarde se proyectará, en el mismo lugar, el documental de Caio Cavechini, Carne y hueso.

En paralelo se desarrollará la programación del Parque Explora, donde se abordarán tópicos como la discriminación que sufren las mujeres con discapacidad, las crónicas de viajes y el potencial alimentario de Colombia.

A las 4:30 p.m. comenzarán las charlas de Mentes curiosas, sección del Festival Gabo que se desarrolla en el Museo de Arte Moderno de Medellín. El autor de algunas de las fotos más célebres de García Márquez, uno de los discípulos de Gabo en la escuela de cine que fundó y un escritor ganador del Premio Cervantes, y amigo personal del Nobel, son algunos de los personajes que participarán en una serie de charlas informales pero profundas.

Conoce toda la programación del día 2 aquí:

Orquideorama – Jardín Botánico

9:00 a.m. – 10:00 a.m.

Reconocimiento Clemente Manuel Zabala a un editor colombiano ejemplar

Diego Martínez Lloreda, Luz María Tobón, Santiago Gamboa

Sección: Premio Gabo

10:00 a.m. – 11:00 a.m.

El continente cautivo: periodismo contra la corrupción y la captura política en América Latina

Hugo Alconada Mon, Daniel Moreno, Mónica González, Dora Montero

Sección: La cocina del periodismo

11:00 a.m. – 12:00 p.m.

El misterio de la audiencias: más allá del ‘engagement’

Eduardo Salles, Carolina Robino, Antonio J. Rodríguez, Pedro Burgos, Margarita Barrero

Sección: La cocina del periodismo

12:00 p.m. – 1:00 p.m.

Ignacio Escolar, periodista a pesar de todo

Ignacio Escolar, Natalia Viana, Jean-François Fogel

Sección: Premio Gabo

8:00 p.m. – 10:00 p.m.

Ceremonia del Premio Gabriel García Márquez de Periodismo 2018

Sección: Premio Gabo

 

Universidad de Antioquia

10:00 a.m. – 11:00 a.m.

Periodismo y construcción de paz: ¿cómo se narra el posconflicto

Martín Rodríguez Pellecer, Juan Diego Restrepo, Patricia Nieto, Nubia Rojas

Sección: La cocina del periodismo

 

Salón Restrepo – Jardín Botánico

2:30 p.m. – 3:30 p.m.

Data Cívica: tecnología en procesos de verdad y justicia en México

Carolina Torreblanca

Sección: Periodismo de tú a tú

3:30 p.m. – 4:30 p.m.

Periodismo performático: la palabra ya no tiene el podr

Sebastián Hacher, Sol Dinerstein

4:30 p.m. – 5:30 p.m.

Sección: Periodismo de tú a tú

Pictoline: crear en la era de la distracción

Eduardo Salles

Sección: Periodismo de tú a tú

6:00 p.m. – 7:15 p.m.

Proyección del documental Carne y hueso

Sección: Muestras

 

Universidad Pontificia Bolivariana

3:00 p.m. – 4:00 p.m.

Las rutas ocultas del dinero

Hugo Alconada Mon, Juan Andrés Guzmán, Ginna Morello

Sección: La cocina del periodismo

 

Parque Explora

3:30 p.m. – 4:30 p.m.

El retrato de la desigualdad

Constanza Portnoy, Jineth Bedoya, Claudia Daut, Silvia Omedes

Sección: La cocina del periodismo

4:30 p.m. – 5:30 p.m.

Los frutos de esta tierra: el poder alimentario de Colombia

Leonor Espinosa, Felipe Macía, Julián Estrada, Jaime Forero Álvarez

Sección: Obsesiones de Gabo

5:30 p.m. – 6:30 p.m.

Viajar para contar(nos)

Diego Cobo, Sabrina Duque, Santiago Gamboa, Alejandro Torres Parra, Pere Ortín

Sección: La cocina del periodismo

 

Instituto Tecnológico Metropolitano – ITM

4:00 p.m. – 5:00 p.m.

Detrás de cámaras: el oficio de dirigir cine documental

Caio Cavechini, Alberto García Ferrer

Sección: Obsesiones de Gabo

 

Museo de Arte Moderno de Medellín

4:30 p.m. – 5:30 p.m.

Heterodoxias de Ruven Afanador

Ruven Afanador, Rocío Arias Hofman

Sección: Mentes curiosas

5:30 p.m. – 6:30 p.m.

El Cervantes de Masatepe

Sergio Ramírez, Gonzalo Celorio Blasco

Sección: Mentes curiosas

6:30 p.m. – 7:30 p.m.

Marcos López y las preocupaciones de un artista pop latinoamericano

Marcos López, Emiliano Valdés, Camilo Jiménez Santofimio

Sección: Mentes curiosas

 

Sobre el Premio y Festival Gabo

Es convocado por la FNPI- Fundación Gabriel García Márquez para el Nuevo Periodismo Iberoamericano con el objetivo de incentivar la búsqueda de la excelencia, la innovación y la coherencia ética en el periodismo, con inspiración en los ideales y la obra de Gabriel García Márquez, y en la dinámica de innovación, creatividad y liderazgo que caracterizan a Medellín, Colombia.

El Premio y el Festival Gabo son posibles gracias a la alianza público-privada conformada por la Alcaldía de Medellín y los grupos Bancolombia y SURA con su filiales en América Latina.

Innovación, el reto constante del periodismo en la era digital

Los finalistas de la categoría Innovación del Premio Gabo 2018 demuestran que ‘innovar’ es un término muy versátil. Foto: Linda De Ávila / Estudiante de Comunicación Social UTB.

Por Lenuska Sierra / Estudiante de Comunicación Social UTB

La Maratón de las mejores historias de Iberoamérica contó, durante la primera jornada del Festival Gabo, con Carola Solé, Juan Heilborn y Mari Luz Peinado, periodistas que participaron en la producción de los tres trabajos finalistas de la categoría Innovación del Premio Gabo 2018.

Balas Perdidas, Los desterrados del Chaco y 28 Días fueron escogidos por el jurado como las propuestas más innovadoras, gracias a uso de plataformas digitales y a su enfoque narrativo para contar las historias.

Los invitados hablaron de algunos aspectos relevantes al momento de innovar en el periodismo, así como de los retos a los que se enfrentaron durante la producción y montaje de sus productos. 

Estas son las 10 recomendaciones principales de los finalistas para apostarle a la innovación periodística:

  1. Escuchar, aprender y cometer errores hace parte del proceso.
  2. Mezclar elementos multimediales que se complementen facilita el desarrollo de las historias.
  3. Conmover y cautivar al público.
  4. Jugar con la ironía y el humor sin perder de vista el fin periodístico.
  5. Pensar los temas y contarlos de una manera que no se ha contado hasta ahora.
  6. Tener en cuenta las experiencias y los puntos de vistas de quienes conocen o son cercanos a las historias que se quieren contar.
  7. Buscar constantemente formatos y metodologías que conmuevan y cautiven al público.
  8. Ser tercos.
  9. No tener miedo a que un proyecto salga mal.
  10. Probar y probar, así sea comenzando con pequeños proyectos.

Este texto hace parte del cubrimiento especial que los estudiantes de Comunicación Social de la Universidad Tecnológica de Bolívar realizan del Festival Gabo 2018 #UTBenFestiGabo.

Cómo hizo Playground para pasar del ‘Me gusta’ y ‘Compartir’ a la acción

Antonio J. Rodríguez, editor jefe de Playground, durante su charla en el Festival Gabo (Foto Joaquín Sarmiento/FNPI).

Por Sebastián Aguirre Eastman | @aguirresebas

Comenzó como un blog de música en 2008 pero diez años después es una de las revistas digitales referentes del periodismo iberoamericano, capaz de convertir una idea periodística en un producto multiplataformas exitoso que aborda temáticas diversas, pero que en un momento dado los llevó a cuestionarse sobre la trascendencia que dicho contenido tenía en la vida real más allá de los innumerables Me Gusta y Compartir que este recibía en la virtualidad.

Durante la charla que sostuvo con los asistentes al Festival Gabo la tarde de este miércoles 3 de octubre, el editor jefe de la publicación, Antonio J. Rodríguez, contó cómo mediante sus videos -una apuesta por la que se inclinaron en 2015 con muy buenos resultados, en especial en Latinoamérica, de donde se origina gran parte de su tráfico-, las audiencias les fueron comentando cómo, además de aprobarlos y compartirlos, se podía hacer algo por aquellos quienes protagonizaban sus denuncias virales. Era pasar del Me Gusta y el Compartir a la Acción; Like Share & Do, que es el lema actual de Playground.

Charla de Antonio J. Rodríguez, de Playground, en el Festival Gabo (Foto Joaquín Sarmiento/FNPI). 

Esta premisa se convirtió, entonces, en la piedra angular de su proyecto. En el Festival, Antonio presentó tres casos de éxito que fueron publicados en los últimos meses, que reflejan la esencia de sus acciones más allá de las redes sociales.

El primero fue el caso de los manteros en Barcelona, España, el término que se refiere a los migrantes que al llegar a la ciudad se encuentran en un callejón sin salida, pues para trabajar necesitan papeles y su única opción son las ventas ambulantes en las calles de esta urbe, y esto supone una serie de problemas políticos entre quienes quieren ayudar a esta población y aquellos que se oponen a su presencia.

Nació así entonces la campaña Top Manta,  con la cual no solo se contó su historia, sino que no siendo eso suficiente se les ocurrió ir más allá y ayudarles con la creación de una marca propia llamada Top Manta, “ropa legal hecha por gente ilegal”.

Playground no solo difundió la campaña sino que les ayudó con el concepto audiosivual y a través de sus audiencias masifició el mensaje. Like, Share & Do.

Charla de Antonio J. Rodríguez, de Playground (Foto Joaquín Sarmiento)
Charla de Antonio J. Rodríguez, de Playground (Foto Joaquín Sarmiento)

 

El segundo caso expuesto por Antonio fue #MeQueer, una campaña en la que personas de la comunidad LGBTI denunciaban casos de abuso sexual y discriminación. Este proyecto, ubicado en “una línea fronteriza entre periodismo y accionabilidad”, fue impulsado por Playground en agosto de 2018 luego de que surgiera en Alemania como continuación, una versión, del #MeToo.

Con este tema, comentó Antonio, taguearon una serie de contenidos afines a esta población en la que informaron sobre esta iniciativa y el periodista que los desarrolló, Ruben Serrano, lo promovió entre sus audiencias, y como consecuencia el hashtag se hizo viral y fue trending topic. Un caso curioso, señaló Rodríguez, por la agilidad con que se hizo y la cantidad de usuarios en redes sociales que alcanzó. Like, Share and Do, de nuevo.

La tercera campaña fue muy conocida en redes sociales: Velaske yo soi guapa, una canción que mezcló el ritmo del trap con la historia del cuadro famoso del siglo XVII, y que denunciaba la presión a la que son sometidas las mujeres por verse siempre bellas, “guapas”.

El video, recordó Antonio, surgió en una época de “feminismo viral” cuyos contenidos ocupan las tendencias virales con mucha frecuencia. Acudiendo a recursos de animación sencillos pero efectivos, Playground quiso hacer “de la necesidad una virtud”. Este contenido trascendió el simple Like and Share y se integró en el día a día de las personas

Como conclusión, Antonio J. Rodríguez planteó que las tres campañas se unían en “la objetividad a la imposibilidad de renunciar al punto de vista; en que la ansiedad por las soluciones produce el nacimiento del querer hacer, que por tanto lleguen propuestas de soluciones y por último que se cree una audiencia activa”. 

Claves para generar buenos contenidos

El editor jefe de Playground dejó algunas claves sobre cómo realizar buenos contenidos, que sean entretenidos pero que no vayan en detrimento de la calidad y la rigurosidad de la información.

“Detrás de cualquier reportaje hay una idea valiosa. Primero tiene que poner las ideas y luego los formatos”. “Después hay que divulgar sin caer en la banalización, todo debe hacerse con rigor y de forma atractiva”. “La clave de la permanencia de los medios de comunicación está en tener el mismo fondo pero con distinta forma”, y “todos los medios tiene que prestar atención a sus audiencias para saber cuáles contenidos son los que más les interesan, pero para que el medio pueda evolucionar tiene que tener una identidad”, fueron algunas de sus frases más valiosas para los asistentes.

https://www.facebook.com/FNPI.org/videos/313886759421686/

Sobre el Premio y Festival Gabo

Es convocado por la Fundación Gabriel García Márquez para el Nuevo Periodismo Iberoamericano -FNPI-, con el objetivo de incentivar la búsqueda de la excelencia, la innovación y la coherencia ética, con inspiración en los ideales y obra de Gabriel García Márquez y en la dinámica de creatividad y liderazgo que caracterizan a Medellín, Colombia. El Premio y el Festival es posible gracias a la alianza público-privada conformada por la Alcaldía de Medellín y los Grupos Bancolombia y SURA con sus filiales en América Latina.

Ponerse en los zapatos del otro, el reto del reportero que quiere apostarle a historias de alto impacto

El periodista Julio Villanueva Chang presentó los trabajos periodísticos de los 3 finalistas en la categoría Texto del Premio Gabo 2018.

Fotografía de Yordi Alcalá / Estudiante de Comunicación Social UTB

Por Kathy Lambis / Estudiante de Comunicación Social UTB

El primer día del Festival Gabriel García Márquez de Periodismo se inició con la tradicional Maratón de las mejores historias de Iberoamérica, evento que se llevó a cabo en el Jardín Botánico (Orquideorama).

Los tres finalistas de la categoría Texto conversaron con el editor y cronista peruano Julio Villanueva Chang. Ellos son Carlos Martínez, de El Salvador, con su trabajo ‘La revolución de las ovejas’; Erick Lezama, de Venezuela, con ‘Son presos políticos, nosotros también’, y Joseph Zárate, de Perú, con ‘Un niño manchado de petróleo’.

Estas son las principales reflexiones que dejó el conversatorio:

Este texto hace parte del cubrimiento especial que los estudiantes de Comunicación Social de la Universidad Tecnológica de Bolívar realizan del FestiGabo 2018 #UTBenFestiGabo

5 razones para que los medios latinoamericanos comiencen a pensar en su impacto

El brasileño Pedro Burgos tiene una misión que, para algunos periodistas, podría sonar como una especie de traición: convencer a los medios latinoamericanos de que “deberían hacer algo de lo que las agencias de relaciones públicas hacen hace años”. Se refiere, por supuesto, a entender con seriedad el impacto de lo que hacen.

A eso se ha dedicado en los últimos años, desde que fundó impacto.jor, una iniciativa que busca, según su sitio web, “medir el impacto del periodismo en las vidas de las personas”. Desde allí, Burgos y su equipo les ha ayudado a varios medios en su país no solo a reivindicar la importancia de su trabajo ante las audiencias, sino también a convencer a sus suscriptores o donantes de que sigan contribuyendo financieramente.

¿Por qué es hora de que los medios latinoamericanos comiencen a pensar con seriedad en el impacto que tienen en la sociedad? Estas son las 5 razones que ofreció Burgos en la primera sesión del taller Impacto y rentabilidad del periodismo de investigación, realizado el pasado martes 2 de octubre por El Faro y el Foro Centroamericano de Periodismo (Foro CAP) en el Festival Gabo 2018.

El impacto es una medida diferente y única para cada medio

Los medios digitales suelen medir su impacto con un conjunto de métricas comunes: páginas vistas, tiempo en sitio, usuarios únicos mensuales o interacciones en redes sociales. Esas medidas tienen una vocación publicitaria y, por eso, no suelen ser la forma adecuada de evaluar el éxito del trabajo de un medio de comunicación.

“Lo principal para entender el impacto de tu medio es entender cuál es su misión”, dice Burgos. Por ese motivo, el impacto es una medida diferente para cada uno. Si el medio intenta influir en el debate público, quizás una medida útil sea saber si los líderes de opinión lo leen; pero si su objetivo es ser la voz de los ciudadanos en los asuntos de una ciudad, una medida de impacto podría ser la cantidad de denuncias a las que las autoridades les dieron trámite.

Los medios deben aprender a ‘vender’ mejor su impacto

Burgos dice que muchos sitios de noticias mercadean sus suscripciones con los argumentos equivocados. “Te venden comodidad, que el periódico te llegue a tu casa, o no ver más el paywall”. A su juicio, los medios deberían hablar de lo que realmente pretenden y aportan, y deberían hacerlo sin remilgo alguno.

Lo bueno, dice Burgos, es que algunos ya están aprendiendo esa lección. Cada vez más, los periódicos digitales están intentando convencer a sus lectores con mensajes que le apuntan a la importancia e impacto de su periodismo. El mejor ejemplo, dice, es The Washington Post, con su lema “Democracy dies in darkness” (La democracia muere en la oscuridad).

Los impactos pequeños suman, pero hay que saber dónde están y cuándo ocurren

“A veces esperamos lograr un big impact, hacer renunciar un ministro o algo así. Pero esas historias son raras”, dice Burgos. Medir la importancia de un medio en términos tan exigentes no es sano y hace perder la vista a los lugares donde el cubrimiento noticioso sí logra cambiar las cosas: una calle que se reparó, o un problema local que se solucionó. “Cuando empiezas a recoger los impactos pequeños, la suma final es más grande”, añade.

Además, las medidas cuantitativas de impacto tienen puntos ciegos que también es importante tener en cuenta. Muchas veces una nota puede tener muy poquitas visitas en un sitio web, “pero si una persona de esas puede hacer algo, ya hay un gran impacto”.

Medir el impacto es una tarea de toda la redacción, pero alguien debe estar a cargo

La tarea de medir el impacto del trabajo de un medio no solo debe caer en las manos del editor de audiencias, o de la persona encargada de las métricas —que también debería existir, y ojalá que esté dedicada solo a eso. Es una labor que requiere “implementar procesos en el flujo de trabajo de la redacción, pues recoger pequeñas historias en las que tu organización ha generado impacto requiere un trabajo”

Al hacerlo, Burgos dice que “los mismos periodistas cambian su manera de pensar sobre su trabajo”. Más allá de obsesionar a los redactores con las métricas —y pervertir su criterio profesional, como sucede a menudo con esa clase de prácticas—, lo que propone es lograr que se sintonicen mejor con la misión del medio para el que trabajan.

Comunicar el impacto ayuda a que el medio sea sostenible

“En tiempos de disminución de la confianza en los medios, las organizaciones necesitan mejorar la comunicación del valor de su trabajo”, dice Burgos. Cada vez más son las audiencias las que pagan por el trabajo de los periodistas, por lo que convencerlas de que su aporte es importante y valioso es crucial para que los medios digitales cuenten con más suscriptores que les permitan hacer su trabajo con independencia.

Pedro Burgos en el Festival Gabo

Burgos estará en la charla El misterio de las audiencias: más allá del ‘engagement’, junto a Carolina Robino, Eduardo Salles, Antonio J. Rodríguez y Margarita Barrero. La actividad tendrá lugar el jueves, 4 de octubre, en el Orquideorama del Jardín Botánico.

Sobre el Premio y Festival Gabo

Es convocado por la FNPI – Fundación Gabriel García Márquez para el Nuevo Periodismo Iberoamericano, con el objetivo de incentivar la búsqueda de la excelencia, la innovación y la coherencia ética, con inspiración en los ideales y obra de Gabriel García Márquez y en la dinámica de creatividad y liderazgo que caracterizan a Medellín, Colombia. El Premio y el Festival son posibles gracias a la alianza público-privada conformada por la Alcaldía de Medellín y los Grupos SURA y Bancolombia con sus filiales en América Latina.

 

ORQUIDEORAMA

Así será el primer día del Festival Gabo 2018

Durante los tres días del Festival Gabo, Medellín será la capital del periodismo en Iberoamérica. Más de 150 invitados se reunirán, del 3 al 5 de octubre, en distintos espacios de la ciudad para tomar parte de 75 actividades en las que el periodismo dialogará con la ciudadanía, la cultura y la tecnología.

La entrada a la gran mayoría de las actividades es libre hasta llenar aforo. En caso de no poder asistir a alguno de los eventos, podrás seguirlos en directo por Facebook Live y por festivalgabo.com.

La primera de tres jornadas comenzará a las 9:00 a.m., en el Orquideorama del Jardín Botánico, con la tradicional Maratón de las mejores historias de Iberoamérica, en la que los finalistas de las cuatro categorías de concurso del Premio Gabriel García Márquez de Periodismo (Texto, Imagen, Cobertura, Innovación) compartirán el proceso detrás de sus trabajos.

La programación continuará en el mismo espacio desde las 2:30 p.m. con charlas sobre temas diversos como la censura a periodistas en Venezuela y Rusia, la crisis en Nicaragua, las mujeres que han transformado el periodismo contemporáneo e, incluso, las historias sobre culinaria y las mentiras o verdades que se esconden detrás de ellas.

A partir de las 3:30 p.m. en el Salón Restrepo del Jardín Botánico, los asistentes podrán conversar con gestores de algunos de los proyectos periodísticos de la actualidad, como Antonio J. Rodríguez, de Playground; Guillermo Cullell, de Vía País; e Ignacio Escolar, de eldiario.es, quien es el ganador del Reconocimiento a la Excelencia del Premio Gabo 2018. Al final de la tarde, el documentalista Caio Cavechini presentará en este espacio su más reciente trabajo, Cartas para un ladrón de libros, en un conversatorio que precederá la proyección del documental.

Paralelamente, en el Parque Explora, tendrán lugar charlas que explorarán tópicos como la construcción de personajes en la literatura, las vicisitudes de la lengua castellana en la actualidad y el fotoperiodismo como herramienta para buscar la verdad.

Y a partir las 4:30 p.m. el Museo de Arte Moderno de Medellín acogerá una serie de charlas informales pero profundas con grandes contadores de historias.

Conoce toda la programación del día 1 a continuación:

Orquideorama – Jardín Botánico

9:00 a.m. – 10:00 a.m.

Maratón de las mejores historias de Iberoamérica – Categoría Cobertura

Rosental Alves, Ginna Morelo, Daniel Moreno, Maye Primera

Sección: Premio Gabo

10:00 a.m. – 11:00 a.m.

Maratón de las mejores historias de Iberoamérica – Categoría Imagen

Omar Rincón, Adriana Zehbrauskas, Leonardo Vaca, Isabella Bernal

Sección: Premio Gabo

11:00 a.m. – 12:00 a.m.

Maratón de las mejores historias de Iberoamérica – Categoría Texto

Julio Villanueva Chang, Carlos Martínez, Erick Lezama, Joseph Zárate

Sección: Premio Gabo

12:00 p.m. – 1:00 p.m.

Maratón de las mejores historias de Iberoamérica – Categoría Innovación

Pere Ortín, Mari Luz Peinado, Juan Heilborn, Carola Solé

Sección: Premio Gabo

2:30 p.m. – 3:30 p.m.

Historias que se resisten a callar

Masha Gessen, Joseph Poliszuk, María Jimena Duzán

Sección: Obsesiones de Gabo

3:30 p.m. – 4:30 p.m.

Nicaragua: el grito de los volcanes

Sergio Ramírez, Gioconda Belli, Sabrina Duque

Sección: Obsesiones de Gabo

4:30 p.m. – 5:30 p.m.

Ellas, transformadoras del periodismo

María Elena Salinas, Natalia Viana, Jineth Bedoya, Natalia Viana

Sección: La cocina del periodismo

5:30 p.m. – 6:30 p.m.

Mentiras y verdades en las historias de la culinaria

Leonor Espinosa, Andoni Aduriz, Julián Estrada, Ocarina Castillo, Benjamín Lana

Sección: Obsesiones de Gab

 

Salón Restrepo – Jardín Botánico

2:30 p.m. – 3:30 p.m.

Playground (Like, Share & Do)

Antonio J. Rodríguez

Sección: Periodismo de tú a tú

3:30 p.m. – 4:30 p.m.

Vía País, red (infinita) de sitios locales

Guillermo Culell

Sección: Periodismo de tú a tú

4:30 p.m. – 5:30 p.m.

eldiario.es: periodismo a pesar de todo

Ignacio Escolar

Sección: Periodismo de tú a tú

6:00 p.m. – 6:45 p.m.

Caio Cavechini: ¿un documental se concluye o se abandona?

Caio Cavechini, Sylvia Colombo

Sección: Muestras

6:45 p.m. – 8:30 p.m.

Proyección del documental Cartas para un ladrón de libros

Sección: Muestras

 

Universidad Católica Luis Amigó

3:00 p.m. – 4:00 p.m.

Periodismo de investigación y el crimen organizado en Latinoamérica

Jeremy McDermott, Daniela Pastrana, Patricio Nunes, José Luis Sanz

Sección: La cocina del periodismo

 

Universidad Eafit

3:00 p.m. – 4:00 p.m.

Periodismo gráfico y nuevas narrativas periodísticas: los casos de BBC Mundo y El Surtidor

Alejandro Valdez Sanabria, Carolina Robino, Juan Gonzalo Betancur

Sección: La cocina del periodismo

 

Parque Explora

3:30 p.m. – 4:30 p.m.

Investigación y construcción de personajes para las historias de no ficción

Gonzalo Celorio Blasco, Alonso Sánchez Baute, Ariel Castillo

Sección: Obsesiones de Gabo

4:30 p.m. – 5:30 p.m.

Fotoperiodismo, memoria y búsqueda de la verdad

Natalia Botero, Joao Pina, Stephen Ferry, Álvaro Ybarra Zavala, Germán Rey

Sección: Obsesiones de Gabo

5:30 p.m. – 6:30 p.m.

Español: ¿la lengua que nos divide?

Leila Guerriero, Álex Grijelmo, Renato Cisneros, Gioconda Belli, Mario Jursich

Sección: Obsesiones de Gabo

 

Museo de Arte Moderno de Medellín

5:30 p.m. – 6:30 p.m.

Sinergias inusuales contra un mal latinoamericano: el caso de Mexicanos Contra la Corrupción

Claudia X. González, Salvador Camarena, Rodrigo Pardo

Sección: Mentes curiosas

Sobre el Premio y Festival Gabo

Es convocado por la FNPI- Fundación Gabriel García Márquez para el Nuevo Periodismo Iberoamericano con el objetivo de incentivar la búsqueda de la excelencia, la innovación y la coherencia ética en el periodismo, con inspiración en los ideales y la obra de Gabriel García Márquez, y en la dinámica de innovación, creatividad y liderazgo que caracterizan a Medellín, Colombia.

El Premio y el Festival Gabo son posibles gracias a la alianza público-privada conformada por la Alcaldía de Medellín y los grupos Bancolombia y SURA con su filiales en América Latina.

‘Sub-realismo criollo’, el Frankenstein de Marcos López

El artista argentino Marcos López fue alumno del Premio Nobel de Literatura colombiano en la escuela de cine de San Antonio de los Baños y es uno de los invitados a la sexta edición del Festival Gabriel García Márquez de Periodismo, que se realiza en Medellín. Estará en el MAMM el 4 de octubre a las 6:30 p.m.

Por Carlos Olimpo Restrepo S.

Marcos López confía en el reciclaje de la inspiración para su trabajo y el de los demás. Reconoce, sin tapujos, que se ha apropiado de ideas ajenas que le ayudaron a crear el sub-realismo criollo y que hoy lo tienen como referencia del arte pop latinoamericano, luego de un trabajo de más de tres décadas.

“Creo que son totalmente válidos los reciclajes de inspiraciones. Quien roba a un ladrón tiene cien años de perdón. Yo he sido ladrón también: he tomado cosas de artistas europeos, como Pierre y Gilles, Robert Bacon, David Lynch. He tomado cosas de la sicodelia amazónica, de la cumbia, del vallenato, del arte mexicano y del realismo mágico de Gabo, que sin duda me inspiró”, explica este nieto de migrantes españoles que se asentaron en las llanuras del norte de Argentina, cerca del río Paraná, lugar que sigue siendo objeto de su exploración artística.

En 1978, en su natal Santa Fe,  descubrió que la imagen, y no la ingeniería que estudiaba entonces, era lo suyo. Tras cuatro años de labor empírica, intuitiva como él prefiere llamarlo, fue a la academia a perfeccionar su técnica, gracias a una beca del Fondo Nacional de Artes, que lo llevó a instalarse en Buenos Aires, donde participó en proyectos de otros fotógrafos y artistas de la pintura y el teatro, entre otros, lo cual lo ayudó a encontrar su propio camino.

Pero serían los meses que pasó al lado de Gabriel García Márquez en 1987 y 1988 en la Escuela de Cine y Televisión de San Antonio de los Baños (Cuba), primero como su alumno de cine documental y luego como aprendiz de guionista, los que le darían un impulso vital a su obra.

Y de ese tiempo al lado del escritor colombiano en la isla hablará Marcos López en la sección Mentes curiosas de la sexta edición del Festival Gabriel García Márquez de Periodismo, el jueves 4 de octubre en el salón de eventos del quinto piso del Museo de Arte Moderno de Medellín, a partir de las 6:30 p.m.

“Allí voy a mostrar unas imágenes inéditas de los primeros días de la escuela de cine. Voy a tratar de proyectar el cortometraje El tango en Cuba y seguramente haré alguna improvisación”. A Marcos, en lugar de conferencias, le gusta montar escenas, porque, como él dice, “ya no quiero ser más artista, sino actor de teatro”.

Para López, más que los conocimientos sobre cine, lo más importante de aquellos dos años fue el acercamiento a personas de otras culturas: latinoamericanas, africanas, asiáticas “y, por supuesto, compartir con Gabo”.

“En 1987, cuando él vio el ejercicio que yo hice supuestamente de cine documental, de 13 minutos, Gabo me dice: tú no tienes más que hacer aquí, ya sabes de esto, vente el año que viene a mi taller de guiones”, asegura Marcos López.

El documental al que se refiere lo armó el argentino en el hotel Riviera de La Habana: “contraté a unos cantores, los subí al trampolín y alquilé unos cocodrilos embalsamados para ponerlos en la orilla de la piscina. Esa puesta en escena es mi modo de documentar la identidad propia, la imagen de América Latina, porque la puesta en escena es un documento”.

La experiencia con los guiones fue diferente. “Yo provengo de la imagen, no de la escritura, y por eso al año siguiente participé en el taller Cómo se cuenta un cuento, en el que teníamos que escribir guiones de 30 minutos para televisión. No está nada mal pasarte cuatro semanas sentado a medio metro de García Márquez hablando delirios. Como experiencia formativa no es nada despreciable, porque es como si él fuera tu coguionist. Ser coguionista con Gabo y conocerlo de cerca lo considero muy importante en mi formación”, relata.

“Después de eso inventé un libro y un título que se llamó Sub-realismo criollo, una especie de surrealismo adaptado a las pampas argentinas y me dediqué todo este último tiempo, tres décadas después de la escuela, a investigar sobre América Latina, a sentirla como un territorio propio, personal”, cuenta.

Ese sub-realismo no es fácil de definir, aunque Marcos López usa una palabra que se le acerca: “Creo que se trata de un Frankenstein que ya no me pertenece. Uno se inspira en otros: me puedo inspirar en Gabo, la cumbia colombiana, Diego Rivera, el son Jarocho mexicano, en Glauber Rocha, y uno va mezclando inspiraciones y lo considero totalmente válido. Uno se apropia, recicla elementos de las generaciones anteriores”.

A esta vía llegó por su necesidad de expresarse. Por eso, sus fotografías pasaron de lo clásico, del blanco y negro, al color, al exceso de color, al montaje y a la dramaturgia, como él mismo lo explica. Son imágenes que dan salida a sus necesidades personales.

“Aquí la ironía es un género que nos permite transitar y hacer la vida más amable. Si no usás la ironía en esta América Latina, te morís de tristeza ante la suma de asesinatos, de corrupción, de desastres. Eso está en mis trabajos. Pero además de la ironía, también trato de encontrar un poco de ternura, que es lo que estoy tratando de aprender en mi propia vida”.

En meses recientes, Marcos López  se ha concentrado en Santa Fe, para ahondar en la vida de dos referentes de la vida cultural argentina y latinoamericana: el escritor Juan José Saer y el cineasta Fernando Birri, sobre los que está haciendo un libro.

De manera simultánea trabaja en la búsqueda de fotografías de su país desde los años 70 hasta la actualidad, que recopilara en un libro que ya tiene título: Patria, una patria que lo tensiona por épocas, pero que también lo alienta a seguir.

“Este momento de Argentina es absolutamente desalentador, tengo miedo de lo que va a pasar en este país. Esa Argentina culta, que fue soñada por América Latina en algún momento, ya no es más, se ha perdido, pero es un país también de una gran potencialidad crítica, es un país admirable en la resistencia. Y no es casual que este país haya dado escritores como Borges, Cortázar… indudablemente algo tenemos”.

 

Sobre el Premio y Festival Gabo

Es convocado por la FNPI- Fundación Gabriel García Márquez para el Nuevo Periodismo Iberoamericano con el objetivo de incentivar la búsqueda de la excelencia, la innovación y la coherencia ética en el periodismo, con inspiración en los ideales y la obra de Gabriel García Márquez, y en la dinámica de innovación, creatividad y liderazgo que caracterizan a Medellín, Colombia.

El Premio y el Festival Gabo son posibles gracias a la alianza público-privada conformada por la Alcaldía de Medellín y los grupos Bancolombia y SURA con su filiales en América Latina.