15 reflexiones sobre la responsabilidad periodística en tiempos de posconflicto

Qué papel juegan las audiencias en un consumo más responsable de la información y cuál debe ser la posición de los medios de comunicación fueron los dos ejes del conversatorio ‘Periodismo y paz: ¿cómo se narra el posconflicto?’.

Por Lenuska Sierra / Estudiante de Comunicación Social UTB

Sobre el lenguaje más apropiado para realizar cubrimiento periodístico en tiempos de posconflicto y la responsabilidad de las audiencias en el tráfico y consumo de información dialogaron, durante el segundo día del Festival Gabo 2018, los periodistas Martín Rodríguez Pellecer, director y CEO de la plataforma digital Nómada; Juan Diego Restrepo, director de VerdadAbierta.com, y Patricia Nieto, cronista y docente colombiana.

Fotografía de Melissa Vásquez / Estudiante de Comunicación Social UTB

Los reporteros participaron en el conversatorio ‘Periodismo y Construcción de Paz: ¿cómo se narra el posconflicto?’ con la experta en comunicación y paz Nubia Rojas. Durante el evento, reflexionaron sobre las definiciones de “conflicto” y “paz” y el papel del periodismo al abordar esas temáticas.

Estas son 15 de las reflexiones que dejó el evento:

1. “Los periodistas tenemos el deber de hacer, con todo el juicio y toda la disciplina, nuestro trabajo”: Patricia Nieto.

2. “La gente, a veces, lo que necesita es que les expliquen las cosas. Hay muchos otros que dan la noticia escueta. Hace falta un periodismo que explique por qué todavía en Colombia se vive la violencia”: Juan Diego Restrepo.

3. “Yo digo que no podemos hablar de posconflicto. Colombia firmó un acuerdo, y está bien, pero no es no es un acuerdo completo”: Juan Diego Restrepo.

4. “Hay quienes no creen en la paz, y hay quienes creen que los que no creen en la paz, creen en la guerra”: Juan Diego Restrepo.

5. “El periodismo no se puede casar con la versión festiva de la paz”: Juan Diego Restrepo.

6. “El conflicto es una relación natural de la sociedad, de los seres humanos”: Nubia Rojas.

7. “En Colombia, el término “paz” es conflictivo, divide y tiene apellido; la paz de Santos, la paz de las Farc, etc.”: Nubia Rojas.

8. “Buscar justicia no es buscar venganza. Explicar por qué es importante para entender el pasado y para que haya justicia”: Martín Rodríguez Pellecer.

9. “A los periodistas nos toca aprender para poder enseñarle a la sociedad que la firma de la paz es solo el comienzo de un proceso”: Martín Rodríguez Pellecer.

10. “Cuando hablamos del lenguaje, estamos hablando de nosotros y de nuestra posición política frente a lo que estamos viviendo”: Patricia Nieto.

11. “Siempre me ha preocupado el lenguaje de los periodistas, porque muchas veces el lenguaje de los periodistas no es el lenguaje de los periodistas, sino el lenguaje de las fuentes de los periodistas”: Juan Diego Restrepo.

12. “Deberíamos criticar profundamente a las audiencias: ¿Ustedes qué escuchan? ¿Qué es lo que les gusta?”: Juan Diego Restrepo.

13. “Es hora de exigirle a las audiencias: ‘¡Oiga, lea mejor!’”: Juan Diego Restrepo.

14. “Si el periodismo de investigación rigurosa se consumiera, las decisiones políticas serían diferentes”: Juan Diego Restrepo.

15. “Es tan importante la forma como el fondo”: Martín Rodríguez Pellecer.

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Este texto hace parte del cubrimiento especial que los estudiantes de Comunicación Social de la Universidad Tecnológica de Bolívar realizan del FestiGabo 2018 #UTBenFestiGabo

Video: Charla ‘La palabra es una herramienta de lucha’ en el Festival Gabo 2017

https://www.facebook.com/festivalgabo/videos/2166246443602246/

 

“La palabra es una herramienta de lucha”, decía el escritor argentino, Juan Gelman, quien junto a su esposa, la psicoanalista Mara La Madrid, escribió el libro Ni el flaco perdón de Dios, donde cuentan historias de hijos de desaparecidos durante la dictadura argentina. Para hablar sobre algunos de los temas que obsesionaron al Gabo en su faceta política: las dictaduras, la memoria y la impunidad. Mara La Madrid (Argentina),  Patricia Nieto (Colombia), autora de Los Escogidos, Patricio Fernández (Chile), director de The Clinic, conversaron con Martha Nubia Bello (Colombia), directora del Museo Nacional de la Memoria.

Sobre el Premio y Festival Gabo

Es convocado por la FNPI- Fundación Gabriel García Márquez para el Nuevo Periodismo Iberoamericano, con el objetivo de incentivar la búsqueda de la excelencia, la innovación, el rigor en el tratamiento de los hechos y la coherencia ética en el periodismo. Está inspirado en los ideales y la obra de Gabriel García Márquez y en la dinámica de innovación, creatividad y liderazgo que caracterizan a Medellín, Colombia. El Premio y el Festival es posible gracias a la alianza público-privada conformada por la Alcaldía de Medellín y los grupos Bancolombia y SURA con sus filiales en América Latina.

Países difíciles de contar

Cuatro experiencias periodísticas en América Latina.

El periodismo es difícil por sí mismo, cada historia trae complejidades a quien la quiere contar, pero hay circunstancias que complican más el oficio. El tercer día del Premio GGM comenzó con una conversación entre cronistas de Venezuela, México, Nicaragua y Colombia, donde hacer periodismo implica un reto adicional.

Luz María Tobón, periodista del diario El Mundo, de Medellín, moderó la charla.

¿Cuál pregunta quieren responder ustedes cuando hacen periodismo?

Carlos Chamorro (Nicaragua. Director de dos programas de televisión y del diario digital confidencial.com.ni): La pregunta que trato de responder a través del periodismo es cómo puedo producir información confiable que sea útil para la sociedad, cómo acercarme a la verdad de la información, algo vital para las decisiones que toma una sociedad democrática.

Patricia Nieto (Colombia. Es periodista desde hace veintitrés años. Se ha enfocado en la investigación del conflicto armado de su país): Desde que comencé a hacer periodismo hay dos preguntas que han guiado mi trabajo: ¿Cómo contar el dolor? ¿Cómo se cuenta el horror, lo que no tiene nombre?

Boris Muñoz (Venezuela. Es colaborador de medios independientes como ProDaVinci.com, y The New Yorker): Yo he querido tratar de entender cómo un país desciende progresivamente a la anomalía, eso es lo que ha pasado en Venezuela durante los últimos veinte años. También me interesa comprender la relación entre el poder y la información, contar lo que pasa detrás de lo que muestran las pantallas del poder mediático. Hacer periodismo desde medios alternativos, porque los canales tradicionales han colapsado.

Alejandro Almazán (México. Es periodista freelance y colabora usualmente con la revista Gatopardo y Milenio. Acaba de ganar el Premio Gabriel García Márquez de Periodismo, en la categoría de crónica y reportaje): Yo vengo de una comuna muy violenta, y siempre me he preguntado cómo la violencia de un solo barrio se multiplica en la ciudad y el país. También trato de responderme para qué sirve el periodismo, cómo repercute lo que hacemos.

¿Cuáles son los obstáculos en sus países para responder las preguntas que se hacen como cronistas?

Carlos Chamorro: En Nicaragua quedan muy pocos medios independientes. Hay una cooptación mediática que dificulta contar la verdad. La primera dama, por ejemplo, asegura que la información, para que llegue “incontaminada” a los ciudadanos, solo puede pasar por los medios oficiales. El gobierno actual no considera a la prensa independiente como interlocutora.

Patricia Nieto: En Colombia se negó por muchos años la existencia de la guerra. Y cuando eso sucede, el periodista es visto como el loco de la casa, se presta poca atención a sus investigaciones, se lo deja solo. Esa situación lo llevó a ser un país de mentiras, a ocultar la realidad que pasaba, generalmente, en las zonas rurales. Y cuando un país se instala en la mentira, el periodista pierde credibilidad.

Boris Muñoz: Sucede algo parecido a lo que cuenta Carlos Chamorro. La hegemonía mediática que ha logrado el gobierno venezolano impone una agenda light, y desaparece los temas que verdaderamente necesitan discutirse. Mi sensación es que la realidad venezolana no está siendo contada. Se ocultan grandes temas y se niega un conflicto social que causa veinte mil muertos al año. Desde el año 2005, por ejemplo, el gobierno dejó de reportar las cifras de homicidios, buscando que el tema salga de la agenda.

Alejandro Almazán: Mi país tiene muchos de los problemas que ya han mencionado. En él los medios tradicionales también son muy cercanos al poder, y dependen del dinero que este les da. Casi todos los medios se han rendido y muestran una realidad en la que parece que no hubiera guerra, ni narcos, ni desaparecidos. Sin embargo, hay pocos medios que sí están contando esas historias.

Otro problema es la indiferencia de la gente por la violencia, y al mismo tiempo la fascinación por la violencia.

Además, todos los actores del conflicto están sobre los periodistas: los políticos, la policía, los militares o los narcos, todos se sienten amenazados por hacer su trabajo. Hay muchos reporteros asesinados en México.

¿Cómo hacen ustedes para saltar las barreras en su profesión?

Alejandro Almazán: Yo trato de hacerlo contando cómo las personas se organizan en nuestro país. Narrando esas iniciativas que sacuden, que conmueven, que muestran cómo el estado ignora al ciudadano. Creo que el periodismo que sabe escuchar también es escuchado.

Boris Muñoz: Mi visión es pesimista, pues en Venezuela la prensa se ha desinstitucionalizado. Los periodistas están solos. Para poder hacer mi trabajo me he refugiado en las corresponsalías extranjeras para poder contar esa realidad. De todas formas hay iniciativas pequeñas que insisten en contar la realidad, y son las que a largo plazo tienen más valor.

Patricia Nieto: No dejando de hacer lo que sabemos y nos gusta, persistir en este oficio. Hay que abrir posibilidades narrativas a otras formas de expresión que salen del texto.

Ojalá tuviéramos la capacidad de provocar que los periodistas de las ciudades hagan trabajos colectivos. Eso nos protegería mucho y nos permitiría contar historias que los otros medios no cuentan.

Carlos Chamorro: No sometiéndonos a la autocensura. Explorar plataformas múltiples, como la televisión por internet. La relación con los ciudadanos depende la calidad del periodismo que hacemos.

En la ronda de preguntas del público, Jaime Abello, director de la FNPI, destacó el trabajo de los cuatro periodistas, quienes publican en proyectos independientes. Para él, es necesario que el periodismo salga a buscar a la gente, y encuentre la forma de llegarle a una ciudadanía dormida. A pesar de que los grandes medios no suelan hacer las investigaciones que la sociedad necesita, el hecho de que sobreviva una minoría disidente tiene un impacto a largo plazo: se deja una información que no desaparece. “La ciudadanía se construye a largo plazo desde las minorías. Los propietarios de los medios tienen miedo, miedo de ser expropiados, de tocar intereses, y por eso no se meten. Entonces los periodistas pueden crear medios alternativos, que por su contenido tienen muchísimo más valor que solo altas cifras de audiencia”, concluyó Abello.

Charla: “Países difíciles de contar”

Participan: Carlos Fernando Chamorro, Confidencial.ni (Nicaragua); Boris Muñoz, colaborador de ProDaVinci.com y The New Yorker (Venezuela); Patricia Nieto, Universidad de Antioquia (Colombia); Alejandro Almazán, Gatopardo (México).

Introduce y modera: Luz María Tobón, El Mundo (Colombia)