“El periodismo digital apenas está descubriendo su potencial, y tendrá la forma que cada periodista quiera darle”, Marcelo Franco

Resumen del taller de Innovación periodística, dictado por Marcelo Franco durante el Premio Gabriel García Márquez de Periodismo. Medellín, 20 de noviembre de 2013  

 
Por Jorge Caraballo

Hay acontecimientos que derrumban tradiciones en un instante. El periodista argentino Marcelo Franco considera que durante el 11 de septiembre de 2001 se produjo uno de esos quiebres. Para él, ahí empezó el periodismo digital. Hoy, sin embargo, la profesión no ha terminado de asimilar ese cambio y se aferra a prácticas que, en algunos casos, son obsoletas. En el taller que dictó durante el Premio Gabriel García Márquez de Periodismo, Franco invitó a los asistentes a reinventar la labor periodística a través de estrategias y emprendimientos en internet.

Franco trabajaba para el diario Clarín, y en la mañana del 9/11, como era costumbre, había acabado de subir al sitio web las noticias más destacadas de la versión impresa. Pero cuando el primer avión se estrelló contra las Torres Gemelas, su profesión dio un giro: en tiempo real, ante los ojos de los usuarios, y sabiendo lo mismo que ellos, los periodistas aprovecharon el intenso flujo de información en internet para cubrir la noticia y enriquecer la conversación que su público sostenía.

El atentado a los torres gemelas fue el punto cero del periodismo digital –explica Franco–, ahí quedó claro el papel activo de la audiencia en la producción periodística. Ahora, doce años después, cualquier acontecimiento pequeño de un individuo puede adquirir una escala de transmisión veloz, social, masiva, como la del 9/11. ¿Cómo competir con eso?

En la afirmación anterior se resume la hipótesis central que propuso Franco en el taller. Según él, el periodismo conservará su valor social si comprende que el Internet no es un canal tradicional para transmitir contenidos (como la prensa, la radio o la televisión), sino que es una conversación permanente en la que puede participar, y que el éxito del proyecto depende del vínculo que genere con los usuarios, pues es con ellos que se va construyendo el producto.

Tenemos que entender que ahora somos parte de las noticias, no dueños de ellas. No pensemos el periodismo como un restaurante al que las personas vienen a comer lo que les ofrecemos en el menú. Ahora tenemos que ir con nuestras noticias a donde está la gente. Es un cambio de perspectiva. Es preciso abandonar la arrogancia, ser humildes y aprender a gestionar audiencias. Eso es innovación.

Marcelo Franco tiene más de una década de experiencia en la creación de estrategias digitales que permiten implementar ideas periodística en internet. A lo largo de las cuatro horas que duró el taller, fue insistente en recordar que hoy el periodista no es solo un gestor de contenidos, sino que también es un gestor de audiencias. Según él, el desafío principal del periodismo actual no es tanto inventar formas de contar historias, sino descubrir maneras efectivas, baratas y rápidas, de llevar las historias a la mayor cantidad de usuarios a quienes les pueda interesar. Tan importante como producir contenido, es captar la atención de la gente, por eso hay que vincularlos a nuestros procesos, y propiciar la interacción entre ellos mismos, asegura Franco.

En la parte final del taller, luego de hacer un panorama de las dinámicas de los usuarios en internet, y de invitar a los periodistas a adaptarse a ellas, el maestro de la FNPI propuso una estrategia para implementar ideas periodísticas en la web:

Una vez tenemos una idea periodística valiosa, deberíamos tomarnos un minuto para pensar al menos en veinte matices, utilizaciones, destinos, perspectivas, que podría tener eso que se nos ha ocurrido. Preguntarnos, por ejemplo, si nuestra idea podría ir dirigida a un público infantil además de a un público adulto; o si podría tener una versión seria y otra cómica; o si podría explicarse tanto desde lo global como desde lo local, etc. Creo que la innovación se da en encontrar múltiples formas para presentar la idea. ¿A cuánta más gente le podríamos hacer llegar nuestro trabajo si se lo propusiéramos en una versión sutilmente diferente?

Ninguno de los treinta asistentes del taller levantó la mano cuando Franco preguntó quiénes creían que las empresas periodísticas permanecerían iguales a hoy dentro de cinco años. El mensaje fue claro y convincente: el periodismo digital apenas está descubriendo su potencial, y tendrá la forma que cada periodista quiera darle si se atreve a innovar.