El periodismo está ante nuevas fronteras posibles de atravesar. A las lógicas clásicas de la investigación les sobrevinieron el auge de las narrativas de no ficción y la crónica. A esas narrativas les continuó una exploración hacia las ciencias sociales y humanas. Se creó un periodismo narrativo de interpretación que se expresó por primera vez, entre otros medios, en la revista Anfibia.
Dispuestos a volver a cruzar los límites del periodismo, un equipo de Revista Anfibia junto al centro cultural Casa Sofia se aventuraron en un concurso de periodismo performático: la interacción entre periodistas y artistas de variados campos para a partir de una investigación crear una performance. La innovación de contar lo real en diversos formatos, experiencias y lenguajes es la ebullición del trabajo compartido entre periodistas y artistas, y el acompañamiento de tutores de diversas disciplinas.
El laboratorio de periodismo performático es un encuentro de dos mundos que se combinan para revelarse de manera inédita. ¿Es cierto que la palabra ya no tiene el poder? ¿Cuáles son esas experiencias autorales que antecedieron a esta? ¿Es legítimo que lo creativo forme parte de un proceso periodístico?
Sebastián Hacher (Argentina) y Sol García Dinerstein (Argentina).